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Tendencias y desafíos

En los últimos días se han publicado varios estudios acerca de las tendencias que prevalecerán en la economía global en 2022. Dado que alrededor de 72 por ciento del PIB mexicano depende del comercio internacional, dichas tendencias son pertinentes para contextualizar el esperado desempeño económico del país. 

¿Cuál será el desempeño de la economía global en 2022? Según el Banco Mundial habrá un proceso de desaceleración con respecto a 2021. La tasa de crecimiento global se reducirá de 5.9 a 3.1 por ciento. Particularmente, la tasa de crecimiento de Estados Unidos se reducirá de 5.7 a 3.8 por ciento.  

El menor crecimiento económico global implicará que México también experimentará una desaceleración. Esta desaceleración se manifestará en las exportaciones y las importaciones, y en los flujos de remesas. Asimismo, se manifestará en los indicadores de ocupación y empleo. 

¿Cómo evolucionarán los precios internacionales? Según la OCDE, la inflación podría superar 5 por ciento 2022. Este repunte en los precios será el resultado de los problemas en la provisión y distribución de insumos para la producción y del esperado incremento en la demanda global de bienes y servicios. 

La inflación global traerá efectos positivos y negativos para el país. Particularmente, la inflación podría coadyuvar a mejorar las finanzas públicas debido a los mayores precios del petróleo. Sin embargo, también podría agudizar las pérdidas de poder adquisitivo de los consumidores del país. 

¿Qué harán los bancos centrales de los países desarrollados en 2022? Según los analistas, se espera que las tasas de interés internacionales se incrementen. Las menores compras de activos (tapering) serán el mecanismo más usado por los bancos centrales para incrementar las mencionadas tasas. 

Las políticas esperadas de los mencionados bancos centrales no anuncian buenas noticias para México. Particularmente, hacen inviable que disminuyan las tasas de interés nacionales. Además, probablemente inducirán periodos de volatilidad en los mercados monetarios, bursátiles y cambiarios. 

México experimentará un año complicado en 2022. La desaceleración económica global, las alzas en las tasas de interés y en la inflación de los países desarrollados plantean desafíos inmediatos de tipo económico y financiero. Asimismo, plantean desafíos de largo plazo para el desarrollo del país. 

Los mencionados desafíos hacen necesario y urgente que haya ajustes en las políticas gubernamentales del país. Si bien no es posible que México sea ajeno a las tendencias globales; hasta cierto punto, sí es viable que las instituciones fiscales, monetarias y de salud blinden la economía nacional. 

Desafortunadamente, ni el presidente López Obrador ni sus colaboradores parecen estar conscientes de estas tendencias globales y desafíos nacionales. Los recientes relevos y cambios en las instituciones nacionales, y la manera de hacerlos, no han contribuido a promover la estabilidad ni el desarrollo del país. 

*Economista e investigador de la Universidad de Guadalajara 

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