Arrinconadas durante décadas en estanterías y bibliotecas, las escritoras de Barcelona han sido recuperadas en años recientes gracias a una obra que resistió la censura, el exilio y el silencio. En la charla “Aquellas chicas que rompieron el molde. El legado de las escritoras catalanas”, realizada en el Pabellón de Barcelona en la FIL Guadalajara, Lourdes Toledo y Núria Cadenes recordaron a autoras como Carmelina Sánchez Cutillas, María Beneito, Maria Aurèlia Capmany y Mercè Rodoreda, quienes escribieron sobre aborto, divorcio, lesbianismo y los dilemas morales de los años 60 y 70. 

Rodoreda, figura central de la literatura catalana, vivió la guerra, la huida y un largo exilio que marcó su obra. Desde Ginebra convirtió el dolor y los “años inútiles” en novelas que retratan la Barcelona devastada de la posguerra. Su fuerza, señalaron, fue una forma de venganza literaria que hoy es reivindicada gracias a políticas públicas y editoriales que recuperan estas voces. Las ponentes invitaron a leer a estas autoras para descubrir otras maneras de narrar y habitar el mundo. 

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