La desaparición de manifestantes y personas que se encontraban en las cercanías de la Fiscalía de Jalisco no fue ejecutada por la orden de algún comandante o por la iniciativa de algunos oficiales, sino una ejecución del Estado debido a que participaron hasta 200 funcionarios, consideró Inés, integrante del Colectivo 5 de Junio Memoria.

Recordó que todo inició por la muerte de Giovanni López a causa de la golpiza que recibió por parte de policías que lo detuvieron por no utilizar cubrebocas al inicio de la pandemia de Covid-19, en Ixtlahuacán de los Membrillos.

Por este incidente, el 4 de junio, mencionó hubo una manifestación multitudinaria, la cual terminó con personas detenidas, por lo que se convocó a una nueva para exigir su liberación, el 5 de junio, pero antes de que se realizara la protesta, quienes acudirían a ella o se encontraban por la zona, fueron desaparecidos por policías.

Durante este hecho, las víctimas sufrieron además de la desaparición forzada, la violación de sus derechos humanos, tortura psicológica y otras más.

Inés señaló que la Fiscalía actuó de forma ilegal y privó a muchas personas de su libertad, sin alguna orden de aprehensión, además consideró que tienen una estructura asentada para las desapariciones, por lo que rechaza que este crimen haya sido orquestado por la orden de un comandante.

“Esto fue una ejecución de Estado, no fue algo que un comandante ordenó, no fue algo que 3, 4 policías decidieron hacer por su cuenta, es algo orquestado desde arriba y realmente se lavaron las manos diciendo, la fiscalía infiltrada, pero las carpetas de investigación, la cantidad de personal que participó en todos los niveles y sí fue la Fiscalía en pleno la que participó en este operativo”.

Rechazó que después de la desaparición forzada de la que fueron víctimas varios jóvenes, el gobierno intente desestimar este cargo y solo haya acusaciones por abuso de autoridad y otros delitos menores.

Indicó que para recordar estos hechos, en el tercer aniversario de las desapariciones forzadas se instaló un antimonumento, el cual se creó con el objetivo de recordar este hecho, pero también para resaltar que Jalisco en el número 1 en desapariciones de todo el país.

El antimonumento que colocaron el 5 de junio de 2023 en Plaza de Armas, en Guadalajara, duró unas pocas horas, porque a medianoche, se apagaron las luces del lugar y la estructura fue retirada por las autoridades, de la cual hasta la fecha se desconoce su paradero y no ha sido reinstalada pese a la orden de un juez.

Para el cuarto aniversario, los integrantes del Colectivo 5 de Junio Memoria realizarán una instalación efímera y comenzaron una campaña de recaudación de fondos para la creación de un nuevo antimonumento del 5J.  

EH 

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