Ureña abre la Grande

El penúltimo festejo del serial madrileño de San Isidro fue una tarde de entrega en la que toreo y afición acabaron por maridar una corrida de triunfo.

El torero español Paco Ureña logró abrir la Puerta Grande de Las Ventas en una emotiva y redondeada faena que lo convirtió en el triunfador absoluto de la 33ª corrida del serial.

Se lidiaron toros de Victoriano del Río, encierro de juego diverso que acabó por deslucir las actuaciones de Sebastián Castella y Roca Rey, quienes tras lidiar a los dos de su lote, se fueron en blanco tras las difíciles condiciones y escaso fondo de bravura que sus bureles ofrecieron.

Empeñosos y con voluntad, pero sin la materia prima del toro, tanto el peruano como el francés se despidieron de San Isidro con un absoluto silencio en sus dos respectivas actuaciones.

La tarde fue para el torero de Murcia Paco Ureña, quien tocó pelo y abrió la puerta grande luego de dos soberbias y emotivas a actuaciones con los dos toros de su lote.

Con su primero, el español logró penetrar y gustar en los tendidos, en una faena llena de poder y clase que le valió una vuelta al ruedo con fuerte petición de oreja. La gloria para el murciano vendría en del cierre, astado al que le cortó las dos orejas tras una faena llena de gozo.

Tandas sentidas por ambas manos a un toro de buenas condiciones que exigió poder fue lo que este coleta luchador supo arrancarle al de Victoriano del Río, que colaboró para el triunfo, dándole la garantizada Puerta Grande de Madrid al diestro ibérico.

Así cerró la penúltima corrida de la feria, que verá su fin hoy con la tradicional corrida de la prensa.

da/i