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Alfaro: discurso del miedo

Ignoro qué sentimiento dejó al personal de la fiscalía el discurso que ayer les expresó el gobernador Enrique Alfaro sobre los hechos suscitados el viernes –cuando él andaba de gira en Chicago– y que fue difundido a través de las redes sociales del gobierno estatal y del propio mandatario, pero a mí me dejó preocupado y sin duda alguna con un dejo de miedo respecto a en manos de quién está nuestra seguridad.

Y es que luego de escuchar sus palabras por espacio de aproximadamente 12 minutos, una pregunta me queda: ¿dónde está el aparato de inteligencia del gobierno del estado? Preocupante es enterarnos de que los delincuentes presuntamente estaban enterados de los pasos del Ejecutivo y el gobierno supo de los planes de la delincuencia hasta que sucedieron los hechos y se detuvo a quienes cometieron uno de los tres ataques contra elementos de la Fiscalía Estatal. Quienes cometieron los otros dos lograron darse a la fuga.

El gobernador Alfaro comentó que los delincuentes “sabían que iba a estar fuera” –dando por bueno que los hampones esperaban su ausencia para cometer los atentados, en dos de los cuales fallecieron elementos de la fiscalía– en una gira por Chicago que, dijo, “tenía programada desde hace tres semanas”. Públicamente se conoció de dicha gira un día antes de hacer el viaje, y gracias a que él mismo lo anunció a través de sus redes sociales, pues en su agenda pública se informaba que tendría “reuniones de trabajo privadas”.

¿De veras los delincuentes esperaban su ausencia para cometer sus agresiones? Si fue así, ¿cuándo y cómo se enteraron los delincuentes de los días en que el gobernador estaría fuera del estado, si se supone que no era una información pública sino hasta 24 horas antes? Dudo que su ausencia haya sido el motivo de las agresiones violentas ese día o que en menos de 24 horas hayan armado todo el plan para atentar casi simultáneamente contra quienes eran sus objetivos.

Luego reveló que los delincuentes sabían que “iba a estar fuera también un alto mando del Ejército encargado de las tareas operativas”. ¿De veras fue así? ¿Cómo supieron que dicho mando de la milicia no estaría en Jalisco como para aprovechar su ausencia y atentar contra elementos de la fiscalía? ¿Acaso la ausencia del gobernador y del alto mando militar les facilitaba su reprobable trabajo?

Pero igual o más preocupante es saber que el gobierno del estado se enteró de los supuestos planes de los delincuentes hasta después de que se cometieron los atentados y se detuvo a varios de esos agresores, lo que significa que el desconocimiento de dicho plan le permitió irse sin ningún problema y mucho menos preocupación a Chicago.

A decir del gobernador, “lo que se buscó hacer el viernes fue un atentado de dimensiones nunca antes vistas en nuestro estado”. Ante esto preguntamos: ¿qué fue lo que impidió que se registrara “un atentado de dimensiones nunca antes vistas en nuestro estado”? ¿La detención de los detenidos en Jardines del Edén? ¿Qué acciones fueron las que se impidió hacer? ¿Hubo más detenidos que tenían encomendada esa tarea de realizar el “atentado de dimensiones nunca antes vistas” o lo iban a realizar quienes fueron detenidos y se les frustró el plan? ¿Dónde se estaba planeando ejecutar esos atentados, quiénes eran los encargados de llevarlos a cabo y cómo se impidió que se concretaran?

Dijo que el objetivo de los delincuentes “era mucho más amplio, atentar contra la vida de muchos más elementos de la fiscalía”. ¿Qué y cómo se impidió que se cumpliera ese objetivo si no hubo más operativos que el por todos conocido en Jardines del Edén?

Una última pregunta: ¿de veras la delincuencia quiere doblar al gobierno, infundir miedo y someter al estado cuando las calles prácticamente son suyas para “matarse entre ellos”?

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I