Con El Zapotillo “no se colapsará” a Los Altos

La historia de proyecto El Zapotillo es la del fracaso en comunicar las posibilidades que entraña al abastecer de agua a tres regiones y mejorar sus condiciones de desarrollo, asegura el presidente del capítulo Jalisco del Consejo Consultivo del Agua, el agroempresario Francisco Mayorga Castañeda.

El también ex secretario de agricultura en las administraciones federales de Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa, señala que no ve un riesgo para la viabilidad de la región de Los Altos, como si lo ve si se mantiene el desorden en el uso de los recursos de que dispone la zona.

“Es bueno que se dialogue entre los tres principales interesados, que son el estado de Jalisco, Guanajuato y la Federación; no puede haber una negociación duradera si alguna de esas tres partes siente que sus derechos o sus intereses no se están cumpliendo. También es bueno porque hay datos nuevos respecto al agua en relación con 1995; está el estudio de Unops, y nuevas realidades demográficas en Guadalajara, en Tlajomulco, en las 14 cabeceras de Los Altos, que se deben considerar”, explicó.

El Diario NTR  (NTR)- Permanecen también las posturas opuestas de actores muy relevantes, ¿no se ha fallado en tejer fino para que un proyecto tan complejo sea vendido a los habitantes de la zona afectada?

Francisco Mayorga Castañeda (FMC) - Coincido, nosotros hemos recorrido parte de las poblaciones que se van a beneficiar; hemos estado también en Temacapulín, encontramos falta de información, han corrido versiones incompletas, a veces malintencionadas que no se ha tenido la capacidad de aclarar, y eso pues provoca una reacción de enojo, de sentirse atropellado e ignorado. Pero sentimos que a la larga, cualquiera que sea la distribución, toda esa agua va a recaer en Jalisco; primero, porque la mayor parte del porcentaje es de Jalisco, y lo que le toque a León va al lago de Chapala; segundo, porque las 14 cabeceras municipales podrían dedicar sus actuales reservas de agua a otras actividades. También están, desgraciadamente con muy poca información, los 12.6 millones de metros cúbicos (m3) que se reservaron desde 1997 para la actividad pecuaria; mucha gente no está enterada, no sabe que un ganadero pequeño de San Diego de Alejandría puede ir a la Conagua a pedir la concesión para uno, dos o tres bordos, no ha habido diálogo entre la autoridad y las organizaciones ganaderas para discutirlo, cómo se va a repartir, qué zonas lo reciben, si va para los que tienen 50 o 30 vacas de líneas de ordeña; debe haber una discusión para determinar el modo de generar un mayor impacto económico y social con esa agua, pero es mucha agua.

NTR - ¿De verdad puede ser un impacto mayor ese volumen?

FMC - Es un millón de pipas, para que la gente tenga una idea, de agua que cae. Inexplicablemente, desde hace 20 años o más, ese volumen está desaprovechado, y cuando lo platico con los ganaderos dicen, no sabía. Ahora lo hemos platicado con el secretario de Agricultura en Jalisco, es el tiempo de hacer bordería con la maquinaria. Otra veta es reusar las aguas residuales, es increíble que incluso las grandes poblaciones no traten, cuando esa agua tratada sirve para producir forraje, y de este modo, es posible que a las aguas de desecho sumadas a los 12.6 millones de m3, más esa agua que retorna de León vía el Turbio, que podamos afirmar que la gran mayoría del agua del río Verde nos beneficie y beneficie a los Altos de Jalisco, al sector pecuario, que es una máquina, es una locomotora de producción de carne , de leche, de cerdo, de huevo.

NTR -¿Usted no vería entonces en riesgo a esta gran potencia productiva que es Los Altos?

FMC - No, al contrario, yo veo otro tipo de riesgos para Los Altos. Creo que tiene más peligro su crecer de forma desordenada la producción ganadera y sin cuidar los aspectos de bioseguridad, que este proyecto que nos lleva a procurar administrar bien los recursos del río Verde. Simplemente, voltear también al desecho de las plantas tequileras, de las granjas porcícolas, todo eso bien tratado son fuentes de agua, y ahora solo se van a causar problemas.

Más allá de debates técnicos sobre hacer un embalse y bordería, Mayorga subraya: “como gente de campo, como ranchero, uno observa muy bien cómo, cuando hay presas, jagueyes, ollas de agua, empieza a haber más humedad alrededor; la vegetación empieza a tardar en secarse, la fauna va a beber, los pájaros. Entonces, esa agua distribuida, aunque sea poca, contribuye al medio ambiente. En un agostadero, climas como estos, hay que cuidar la distribución del pasto y la distribución del agua. El animal puede aguantar días sin comer pero no días sin beber, tampoco puede estar el agua muy lejos, porque se niega a buscarla, o al buscarla el animal pierde peso  y energía, se debilita, y un becerro pequeño no puede caminar tres o cuatro kilómetros con este solazo. Cuando usted distribuye el agua, cambian las cosas tremendamente. Por eso, aunque no está bien estudiada la interrelación entre aguas superficiales y acuíferos, pues es evidente que hay una conexión; si vamos a detener agua y evitar que corra fuerte y se vaya, eso va a mejorar los ecosistemas con un buen manejo”.

NTR - Está el tema del cambio climático, el privilegio de las ciudades, ¿no cree que no se ha considerado su impacto en la región?

FMC - La ciudad y el campo no son realidades que estén separadas o antagónicas, son interdependientes, entonces debemos resolver los problemas de ambas de forma simultánea; con un buen sistema de tratamiento y de reuso le damos dos, tres o cuatro vueltas al agua. Por eso creo que no siempre esas disyuntivas no son reales. La lógica ante el cambio climático es tener un almacén, un inventario, como la gente lo hace en caso de un huracán, guardar para administrar.

NTR - lo que nos falla es generar modelos con éxito que hagan que la gente no tema…

FMC - Hay que involucrar a la gente, entre todos se pueden encontrar soluciones inimaginables. Una empresa ahora mexicana como Metafin, que es la empresa israelí inventó el riego por goteo, esa empresa está en Guadalajara y está dispuesta a probar con los productores, proyectos novedosos. Un proyecto en India, donde se hace un desarrollo de 20 mil hectáreas con puros pequeños productores, y lo transformaron con sistemas de riego con goteo o de mucha precisión, un sistema de generar , de producir, de distribuir, es un ejemplo de lo que podemos hacer si nos ponemos de acuerdo; si no, sencillamente esa agua nadie la va a tener (…) las ciudades no pueden darse el lujo de perder zonas productivas porque de ellas comen, pero además, el desarrollo rural permite retener gente,  entonces buscar la distribución equitativa de los recursos, suelo, agua, población vegetación, y se logra, hay un futuro para todos.

JJ/I