Haremos Historia: Netanyahu en Washington 

JERUSALÉN. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, partió a Washington, donde sostendrá dos entrevistas con el presidente estadounidense, Donald Trump, sobre el llamado “acuerdo del siglo”, que pretende solucionar el conflicto palestino-israelí. 

“Me reuniré con el presidente Trump mañana (hoy) y luego el martes, y juntos haremos historia”, dijo Netanyahu al partir a Washington, a donde también fue invitado su principal rival, el líder del partido Azul y Blanco, Benny Glantz, aunque para entrevistarse con Trump por separado. 

En tanto, en Ramalá, sede de la Autoridad Nacional Palestina, el canciller palestino Riad al-Malki señaló que se estudian las medidas prácticas para responder al esperado anuncio acuerdo, perfilado desde el inicio del actual gobierno estadounidense. 

La corporación israelí de Radio Difusión Pública (KAN) señaló que el documento mantendrá el control por Israel de Jerusalén y los territorios adyacentes, lo cual incluye el Muro de los Lamentos, aunque zonas de la llamada Ciudad Santa serían parte del futuro estado palestino. 

Además, 30 por ciento de Cisjordania, territorio palestino, sería anexado por Israel, incluido todo el valle del Jordán, pero con el desalojo de asentamientos considerados ilegales y cediendo territorio a cambio de lo anexado. 

El estado palestino estaría desmilitarizado y sería formado por el restante 70 por ciento de Cisjordania, mientras la Franja de Gaza también tendría un estatuto desmilitarizado, e Israel tendría libertad de acción militar en dicho Estado. 

En reunión con el embajador egipcio Essam El-Din Ashour, al-Malki explicó la posición palestina de rechazar lo que el “acuerdo del siglo” prevé para Jerusalén y en general todo el documento, rechazado por el mundo árabe, citó la agencia palestina WAFA. 

ACUERDO 

La corporación israelí de Radio Difusión Pública señaló que el documento mantendrá el control por Israel de Jerusalén y los territorios adyacentes, lo cual incluye el Muro de los Lamentos, aunque zonas de la llamada Ciudad Santa serían parte del futuro estado palestino.

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