El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco confirmó que el miércoles halló huesos, dientes, aros de aprehensión, entre otros materiales, en el rancho Izaguirre, en la comunidad de La Estanzuela, en Teuchitlán, predio que ya había sido intervenido en 2024 por la Fiscalía del Estado (FE). Cuestionado al respecto, el titular de la dependencia, Salvador González de los Santos, justificó que el terreno “es muy grande”.

“Lo que pasa es que es un predio bastante grande, es un rancho bastante grande. Si recuerdan en aquél entonces hubo 10 detenidos y se liberaron a dos personas, se hizo una búsqueda en ciertas partes, desde luego del rancho se encontraron algunos restos; sin embargo, no se pudo procesar todo el rancho porque son bastantes hectáreas”, justificó.

En el rancho hay una bodega en la que integrantes del colectivo hallaron ropa, calzado, maletas y artículos personales; sin embargo, el fiscal afirmó que eso ya había sido procesado y que incluso se hizo un cruce con algunas carpetas de investigación de personas desaparecidas.

Luego de que el miércoles el colectivo diera cuenta de los hallazgos en el rancho, la oficina de Comunicación Social de la Fiscalía informó que en el sitio se encontraron restos óseos calcinados en número por determinar, 96 casquillos de diversos calibres incompletos, deformes u oxidados, tres cargadores y unos aros aprehensores metálicos.

BUSCAN A AGRESOR DE ASTRID

A Eduardo G., el asesino de Astrid y su hijo Fernando, de 16 años, la FE lo busca en varios estados, incluso ya emitió alertas migratorias para evitar que salga del país.

Así lo informó González de los Santos, quien aseguró que la FE ha tenido coordinación con sus homólogas para localizar al señalado.

“Hemos girado colaboración a todos los estados, hemos girado alertas migratorias, pues desde luego para evitar que se pueda salir del país”, aseveró.

La noche del martes Eduardo mató con un martillo a Astrid y su hijo, y dejó a la hija de ella, una menor de edad, herida de gravedad.

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