Muere mujer tras desatención de 911

Pese a los esfuerzos de dos mujeres por impedir que arrollaran a Rosenda sobre el Periférico, y no obstante que hicieron tres llamadas al número de Emergencias 911 Jalisco –que atendió, pero la reacción fue ineficaz–, ella evadió los cuidados, avanzó por la vía rápida y murió atropellada.

Rosenda era paciente de un hospital de salud mental en Fresnillo, Zacatecas, donde residía, aunque ella era originaria de Huejuquilla, Jalisco.

Era la madrugada del domingo y apenas se incorporaban al Periférico Norte, rumbo al poniente, después de la glorieta de la carretera a Saltillo, cuando dos mujeres vieron a una persona intentando cruzar los carriles centrales. Se alarmaron: quien se atreviera a eso estaba en peligro.

Retornaron de prisa para ayudar frente al Tren Ligero. Se detuvieron. Sobre la barda perimetral encontraron a la persona: una mujer que ya había cruzado el sentido contrario y que ahora luchaba por trepar las barreras de concreto.

Tania Gutiérrez cruzó y tendió la mano a la mujer, que pudo superar la barrera. Juntas atravesaron ante el riesgo que suponía la vía rápida después de una noche de sábado.

Recargada sobre la camioneta pudieron ver a Rosenda a detalle. “Hablaba despacito, casi no se le escuchaba”, relató Bárbara Sánchez Topete, quien esa mañana de domingo relató los hechos en su muro de Facebook.

En el historial de llamadas del celular de Bárbara se encuentra el primer reporte que hizo al número de emergencias 911: a las 2:58 horas solicitó al operador asistencia médica o una patrulla que las apoyara, pues la mujer que dijo llamarse Rosenda López Valenzuela estaba desorientada y tiritaba de frío.

“Estaba descalza, toda echa del baño en el pantalón, con ropa rota, sucia, también el cabello, y dijo que era de Fresnillo”. También les dijo que habían abusado sexualmente de ella.

El operador preguntaba “que si estaba golpeada, alcoholizada”, frases que Bárbara repetía a Tania, y ella, a Rosenda que no las contestaba. El operador quedó en enviar una patrulla.

Los minutos avanzaban, la ayuda no llegaba. A lo lejos, Bárbara y Tania lograron avistar las luces de una patrulla en dirección a la carretera a Saltillo. Nunca se acercó.

Bárbara y Tania retuvieron a Rosenda: primero con comida y un refresco, que llevaban para cenar en casa después de terminar un turno; también le ofrecieron un cigarro. Bárbara le prestó su chaleco ante el estremecimiento de Rosenda, quien, en respuesta, le dio un abrazo.

La paciencia de Rosenda era limitada, “yo le decía que la ayuda no tardaba, que se sentara un ratito más. Mientras tanto, le sacaba plática y le decía que iba a estar bien, que no tuviera miedo”; también Bárbara tuvo que tomarla de un brazo para que no escapara. Pero lo hizo.

Justo a las 3:33 horas, Rosenda se soltó de un jalón y resbaló por el terraplén que conduce hacia el carril lateral. Avanzó, descalza. Las mujeres subieron a la camioneta, remarcaron al número de emergencias. La siguieron y vieron cómo regresaba a los carriles centrales hacia el paso deprimido.

Tania aceleró, rodeó la glorieta, se volvió meter al Periférico, retornó frente al tren. Justo en el descenso al desnivel vieron el cuerpo de Rosenda.

“¡Cómo es posible que desde las 2:58, hasta este momento no hayan venido y ya está atropellada y ya está muerta!” le gritó Bárbara al operador a las 3:46, quien se limitó a responder: “Ya pasé su reporte, yo sólo paso el mensaje”.

Bárbara colocó dos triángulos reflectores para que los vehículos ya no arrollaran a Rosenda.

“La primer patrulla llegó como a las 4:15 am”, publicó Bárbara en su Facebook; “me siento muy triste porque creo que pudimos haberla salvado”. Antes de siquiera imaginarse el fatal desenlace, Bárbara le tomó una foto a Rosenda “para que sus familiares pudieran localizarla”.

La Policía de Zapopan informó que a las 1:53 horas llegó el reporte “donde referían que se encontraba caminando (una mujer) sobre la carretera, se ubicó la unidad y no localizo nada, hizo un recorrido y no fue posible localizar a la femenina o reportante”.

El reporte surgió una hora y cinco minutos antes a la intervención de Bárbara y Tania.

Además, la misma corporación reportó que a las 3:17 “sale nuevamente el reporte, acude la unidad y la localiza con las heridas referidas por atropellamiento”.

Se solicitó respuesta a la fiscalía sobre los reportes recibidos a cabina la madrugada del domingo, en específico los de Periférico y carretera a Saltillo, pero hasta el cierre de esta edición no precisaron información sobre el caso.

La cuenta de Twitter @911Jalisco se describe como una cuenta automatizada. En los tuits publicados aparece información sobre un atropellado en “Zapopan, colonia Auditorio, Periférico y carretera a Saltillo. Tome sus precauciones” a las 2:59 de la mañana.

Más tarde, se reiteró en el mismo lugar y por un atropellado un tuit a las 4:47 de la mañana; y a las 5:07 se precisó en otro sobre un atropellado en Zapopan, en colonia Hogares del Batán, sobre Anillo Periférico y carretera A Saltillo.

DIF la atendía

En el Sistema DIF de Fresnillo, la directora, Juana García Calderón, informó que la Policía Federal de Caminos “a nosotros nos la reportan como hace tres meses… se aventaba a los carros sobre la carretera a Fresnillo, Zacatecas.

Durante 15 días, el DIF Fresnillo la internó en el hospital de Calera, “optamos por el tema de canalizarla a salud mental, fue atendida”, precisó la directora. El jueves 5 de julio salió. El padre de Rosenda quedó como responsable. Volvieron a saber de ella el domingo tras la publicación de Bárbara.

Ella y su familia eran originarios de Huejuquilla El Alto. Iban y venían cotidianamente. En Fresnillo vivían en la colonia Plan de Ayala, una comunidad en situación vulnerable, informó la directora de DIF de Fresnillo.

García Calderón convivió con la familia de Rosenda cuando requerían el apoyo. La describió como “cariñosos con ella, el papá, hermano y otra hermana”.

De acuerdo con la funcionaria, Rosenda fue diagnosticada con una enfermedad mental desde hace un año. Desde entonces, la familia reportaba que “se les escapaba por la madrugada, la teníamos detectada, se tenía detectada”. Entre los lugares donde era localizada era la Central Camionera de Fresnillo.

Tras el atropellamiento y muerte de Rosenda, el DIF de Fresnillo informó a la familia; uno de sus hermanos recibió la noticia que ya sabían, pues ya estaban en contacto con el Ministerio Público.

Sobre el presunto abuso sexual, el DIF del municipio zacatecano no tenía noticia. Aunque viven en condición vulnerable, se informó que la familia no recibió el apoyo. No han confirmado si lo requieren para gastos funerarios. Desconocen si el cuerpo de Rosenda será traslado a Huejuquilla el Alto o a Fresnillo.

Rosenda se trasladó, por medios desconocidos, 357 kilómetros desde la colonia Plan de Ayala, Fresnillo, donde vivía, hasta el lugar donde murió, sobre el Periférico Norte.

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FRASE

“Estaba descalza, toda echa del baño en el pantalón, con ropa rota, sucia, también el cabello, y dijo que era de Fresnillo”
Bárbara Sánchez, una de las mujeres que ayudó

JJ/I