Analizan ruta para el acoso callejero

Debido a la generalidad con la que se aborda el acoso callejero tanto en el Código Penal del Estado como en el Reglamento de Policía y Buen Gobierno de Guadalajara, la Policía tapatía enfrenta serias dificultades para que los reportes por esta causa lleguen a tener una sanción.

“Cuando atendemos un reporte de tocamiento o de acoso empieza el juego de competencias, porque al darle vista al Ministerio Público, éste nos dice que no, que es una falta administrativa y, nosotros, como Policía de Guadalajara, tenemos que identificar si realmente es una falta o un delito (…) Tenemos que estar buscando el que nos atiendan los servicios y el que la ciudadana se vaya con claridad de que realmente fu atendido y que se va a sancionar la conducta”, expuso Zaira Franco Leal, comandante de Prevención Escolar y Código Rosa de la corporación tapatía.

Lo anterior lo expuso durante la mesa de análisis realizada en el Ayuntamiento de Guadalajara para discutir el dictamen que sanciona el acoso sexual callejero como falta administrativa, propuesto por el regidor Luis Cisneros Quirarte.

La confusión, según explicó Laura Cisneros, coordinadora jurídica de la Secretaría de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres (SISEMH), se desprende de la redacción del Código Penal del estado, que, en su artículo 176 bis, define al hostigamiento sexual como el delito que comete quien “con fines o móviles lascivos asedie u hostigue sexualmente a otra persona de cualquier sexo, valiéndose de su posición jerárquica o de poder” y la del reglamento que se pretende modificar, en el que se abordan faltas administrativas como el “molestar o causar daño a las personas”, “agredir a otro verbalmente en lugares públicos o privados causando molestias” o “asediar impertinentemente a cualquier persona”.

Por ende, tanto Cisneros como Alicia Ocampo, titular del Instituto Municipal de las Mujeres de Guadalajara (Inmujeres GDL), propusieron a los regidores tapatíos que en las modificaciones al reglamento se hable expresamente de acoso sexual callejero, se detallen claramente qué comportamientos serían considerados una falta y cuáles un delito y se especifiquen los lugares en que éste puede suceder. 

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FRASE

“Cuando atendemos un reporte (…) empieza el juego de competencias, porque al darle vista al Ministerio Público, éste nos dice que no, que es una falta administrativa y, nosotros, como Policía (…) tenemos que identificar si realmente es una falta o un delito”
Zaira Franco Leal, comandante de Prevención Escolar

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