INICIO > ZMG
A-  | A  | A+

Esfuman en hospital medicina para bebés

MÚLTIPLE. En las anormalidades que se detectaron en La Máter están implicados el ex director, ex subdirector médico, ex jefa de enfermeras y otros empleados. (Foto: Jorge Alberto Mendoza)

Empleados de la Maternidad Esperanza López Mateos sustrajeron medicamentos controlados por los que la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) había pagado casi 9.6 millones de pesos (mdp).

Documentos a los que NTR Guadalajara tuvo acceso confirman que se desconoce el destino que se dio a 959 dosis de fosfolípidos de pulmón porcino Curosurf, los cuales fueron comprados al proveedor Distribuidor Internacional de Medicamentos y Equipo Médico, a un costo unitario de 10 mil pesos.

Este medicamento es utilizado en bebés prematuros por los problemas que tienen para respirar. En las farmacias el medicamento tiene un costo de al menos 15 mil pesos.

Ante estas irregularidades, el 10 de enero la Contraloría del Estado presentó una denuncia penal de hechos ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por la posible comisión de los delitos de peculado, uso indebido de facultades y atribuciones de los servidores públicos, y delitos cometidos en la custodia de documentos. Los señalamientos apuntan al personal directivo del hospital y a los encargados del almacén.

Este hospital, también conocido como La Máter, depende de la SSJ. Las irregularidades que se encontraron corresponden a los ejercicios de 2016 y 2017, cuando al frente de la dependencia estatal estaba Antonio Cruces Mada.

DESTINO DE FÁRMACO SE DESCONOCE

Según los resultados de la revisión que se llevó a cabo, ante la crisis que vivió la Maternidad López Mateos el año pasado, entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2016 salieron del almacén 831 dosis del medicamento controlado, y en el procedimiento se hallaron diferentes anomalías. Del 1 de enero al 31 de diciembre de 2017, se entregaron otras 128 dosis. En las indagatorias precisan que “no se proporcionaron las recetas médicas mediante las cuales se documenta el destino final de este medicamento, determinándose un faltante de 959” dosis.

Los señalamientos sobre la presunta responsabilidad hacia quien ocupaba la dirección, Jorge Aldrete Sánchez, son porque “provocaría un daño al patrimonio de dicho nosocomio al distraer de su objeto a los mismos para lo cual fueron adquiridos, probablemente tener como resultado el obtener un lucro indebido, porque permitió la sustracción de medicamentos”, según se lee en los documentos.

Entre las anomalías que se encontraron está la entrega de medicamentos sin que se presentara el formato de aprovisionamiento, sin sello del almacén, así como la omisión del nombre del solicitante y quien lo recibía, sin firmas y sin fechas.

Según relataron los encargados del almacén en las investigaciones que se llevaron a cabo, recibieron la indicación de entregar los medicamentos comunes “a quien lo solicitara, a libre demanda”. En cuanto a las fármacos considerados como “controlados”, entre los que están los fosfolípidos de pulmón porcino Curosurf, se entregaban y eran anotados “en una libreta” simple; para hacer la entrega, agregaron, se solicitaba la receta, pero nunca recibieron indicaciones de qué debía contener la misma.

Además, aceptaron que no había un registro con el nombre, fecha o firma del personal al que se entregaban estos medicamentos. Las recetas, señalaron, sólo eran un control interno, pero no se llevaba un registro formal de las mismas.

SIN CONTROL EN EL ALMACÉN

Uno de los trabajadores del almacén, quien precisó que él era camillero y lo movieron a esta área, señaló que de la Dirección de Recursos Humanos le ordenaron que “no negara ningún medicamento” que le fuera solicitado, y aceptó que nunca recibió capacitación del manejo que debía dar a los productos que ahí se resguardaban.

Otro de ellos señaló que nunca se elaboraban inventarios de lo que había en el almacén, sino informes simples para el cambio de turno. Además, uno se percató de la desaparición de dosis del medicamento controlado, lo reportó a sus superiores, pero no se investigó.

Ante las reiteradas y diferentes anomalías que se encontraron, la Contraloría del Estado concluyó que no se trata solo de una falta administrativa, sino que se podría “encuadrar el injusto penal de peculado”.

Además de la presunción de irregularidades por parte del director Jorge Aldrete, se menciona como posible responsable al ex subdirector médico Alfredo Macháin Loera. En ambos casos, es por “no tener los controles necesarios para las entradas y salidas del medicamento de alto costo, así como la distribución que se debía dar al mismo”; por no controlar al personal a su cargo; por usar indebidamente sus atribuciones en cuanto a la “vigilancia del personal que tenía acceso al medicamento”, así como por contratar y/o autorizar que personal que no cumpliera con el perfil o no tuviera las atribuciones necesarias “decidiera el uso y destino del medicamento”.

Además, se menciona a quien era jefa de enfermeras porque permitió el extravío de medicamentos y por “no proceder conforme a derecho, demostrando un interés de obtener un fin distinto al institucional, incluso un lucro indebido”; por extraviar recetas que fungían como constancias documentales de la distribución del medicamento, y por no hacerlo del conocimiento de sus superiores.

También se precisa que los responsables del almacén, aunque hayan recibido órdenes, no son menos responsables porque debido a su falta de cuidado “se llevó a cabo el ilícito mencionado”.

Sin registro

  • En 2016 se entregaron sin control 831 dosis de fosfolípidos de pulmón porcino Curosurf
  • En 2017 se entregaron sin control 128 dosis del mismo medicamento
  • En total se reporta el faltante de 959 dosis de fosfolípidos de pulmón porcino Curosurf
  • Cada dosis tuvo un costo para la Secretaría de Salud de 10 mil pesos, por lo que el monto total es de 9 millones 590 mil pesos

Algunas irregularidades encontradas

  • No se entregaron formatos de aprovisionamiento en el hospital
  • Solicitudes de aprovisionamiento sin sello de recepción del almacén
  • Las recetas no tienen nombre de quien las solicita
  • Las entregas no tienen firma del jefe del almacén
  • No se tiene el nombre y/o firma de quien recibió el medicamento
  • No se señala la fecha en que fue solicitada la medicina
  • No se precisa la fecha en que fue entregado el fármaco
  • No hay firma de quien lo solicitó

Posibles delitos

Por las anomalías halladas en La Máter se podrían fincar cargos por: peculado; ilícitos cometidos en la custodia o guarda de documentos, y uso indebido de facultades y atribuciones de los servidores públicos

______

“No se proporcionaron las recetas médicas mediante las cuales se documenta el destino final de este medicamento”
Extracto de los documentos de las indagatorias a La Máter

JJ/I