Joaquín Guzmán Loera no podrá abrazar por unos segundos a su esposa, Emma Coronel Aispuro, como había pedido a un Juez de Estados Unidos.

El Juez Brian Cogan, encargado del caso de El Chapo, consideró que por problemas de seguridad no podría ser posible que el capo abrazara a Coronel Aispuro, previo al proceso que iniciará el próximo martes.

Pese a que confesó sentir empatía con la petición del capo y reconoció que su conducta en los 22 meses de reclusión que ha sobrellevado ha sido ejemplar, Cogan expuso que los peligros son elevados.

“Las mismas preocupaciones que provocaron la implementación de condiciones de encarcelamiento severas existen todavía. Especialmente en vísperas del juicio, cuando hay más razones para que Guzmán intente escapar o amenazar a testigos”, indicó el Juez.

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