Plan para Bajío, con recursos de Semadet

Una parte con recursos propios de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) y otra con una partida nueva, cuyo monto aún no se define, es como la dependencia estatal prevé realizar las 39 acciones que le mandata el programa de recuperación ambiental en El Bajío, establecidos en el decreto de mismo nombre publicado el martes por el Ejecutivo estatal.

A través de una ficha informativa, la Semadet reportó que de los cuatro ejes de acción que se fijan en el programa, el de conservación de suelo se ejecutará a través de la Dirección General de Manejo de Fuego, que para este año se le asignaron 57 millones de pesos.

Los otros tres ejes –manejo sustentable del agua, conservación de la biodiversidad y sustentabilidad– sí demandarán recursos adicionales, “con el fin de realizar estudios geohidrológicos y edafológicos (de suelo), para con ello diseñar un plan de manejo y un sistema de monitoreo de agua subterránea de largo plazo que permita concretar acciones ejecutivas específicas de restauración en El Bajío”, informó textualmente la dependencia.

De acuerdo con el decreto de Zona de Recuperación Ambiental de El Bajío, la Semadet asume la obligación de realizar obras que garanticen la función hidrológica de esta área de la ciudad a futuro –se trata de un territorio altamente presionado por intereses inmobiliarios, incluida la Villa Panamericana–, tales como implementar medidores para la extracción del agua subterránea, construcción de pozos de absorción, entre otras.

Sin embargo, el más ambicioso e incluso demandado por especialistas es la implementación de un sistema de monitoreo para conocer la dinámica del agua y su calidad, pues se trata de una zona de alta capacidad de infiltración para la recarga del acuífero de Atemajac. 

Respecto a este proyecto, Arturo Gleason Espíndola, especialista en manejo de recursos hídricos, manifestó que se necesita un sistema de monitoreo que en tiempo real genere información relativa a la cantidad de agua que se absorbe en la zona, su dinámica y componentes, el cual requiere una fuerte inyección de recursos.

Aunque la Semadet no ha otorgado mayores detalles sobre este sistema de monitoreo, que sería inédito en Jalisco, sí establece en el decreto que el plazo para ejecutarlo es de entre uno y cinco años.

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