Requiere Paula de ayuda y justicia

Las transfusiones de sangre para Paula Rebeca Andrade Silva han sido constantes luego de que fuera atropellada el jueves por un automóvil en Zapopan.

El viernes por la noche la joven despertó y encontró que ya no tenía piernas. Además Aba, la aseguradora del conductor, le hizo saber a través del ministerio público que no negociará la reparación del daño.

La tarde del jueves, la joven de 27 años caminaba afuera de Ciudad Judicial cuando un vehículo la arrolló en la banqueta el jueves 20 de febrero.

Una serie de fracturas que sufrió debido a la colisión hicieron necesaria la amputación de sus dos piernas y quedó con fracturas en la cadera que requieren al menos otra cirugía, pero por ahora sus condiciones de salud no son adecuadas para realizarla.

Desde entonces, la familia de Paula Rebeca no sabe todavía qué es lo que ella decidirá acerca de su futuro; por ejemplo, en cuanto a un posible litigio por los daños permanentes que sufrió. El conductor del vehículo permanecía hasta ayer detenido en espera de la determinación de su situación legal, de acuerdo con familiares.

Hasta ayer, Paula Rebeca continuaba requiriendo transfusiones sanguíneas, por lo que sus familiares invitan a hacer donaciones a partir de las 5 horas de este lunes, cuando inicia operaciones el banco de sangre del nosocomio para entregar fichas a los interesados, aunque es recomendable llegar antes para alcanzar una. Se acepta cualquier tipo sanguíneo.

El domingo la sobreviviente permanecía hospitalizada en el área de terapia intensiva y su vida ya no corría peligro inmediato tras ser valorada en condiciones de salud estables. Aunque no sufrió lesiones internas, existía el riesgo de que su situación empeorara debido a su situación física.

A NTR se informó que la compañía de seguros Aba no había establecido ningún tipo de contacto con la víctima ni con sus familiares, ni se les había permitido acceder a información como el número de póliza o el número de siniestro.

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