El analista en defensa y seguridad nacional, Rodrigo de León Mondragón, calificó la renuncia de Alejandro Gertz Manero a la Fiscalía General de la República como un movimiento positivo dentro de la estrategia federal de seguridad.

De acuerdo con el especialista, la decisión ocurre tras años de lentitud en los procesos, politización interna y cuestionamientos sobre el uso personal de la institución, factores que deterioraron la confianza ciudadana y mantuvieron rezagados miles de expedientes. Esta salida abre la posibilidad de alinear de manera más eficiente a la Fiscalía con la Secretaría de Seguridad y con la estrategia impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum.

A ello se suma la llegada de Ernestina Godoy como encargada del despacho, así como la convocatoria del Senado para elegir a quien ocupará la titularidad de la FGR. Aunque existen perfiles mencionados, como el ministro en retiro Arturo Zaldívar y el secretario Omar García Harfuch,

Rodrigo de León Mondragón subrayó que el reto principal no depende del nombre, sino de transformar a fondo el organigrama, agilizar la investigación criminal y recuperar la autonomía y legitimidad de la institución.

Finalmente, el analista destacó que la coordinación entre Sheinbaum, Harfuch y Godoy, podría ser similar a la que se aplicó en la Ciudad de México, lo que podría permitir una transición más eficaz, pero advirtió que la Fiscalía enfrenta un descrédito profundo y deberá demostrar, con hechos, que puede ofrecer un nuevo modelo de procuración de justicia.

GR