El mundo del futbol está de luto. El delantero portugués del Liverpool, Diogo Jota, falleció la madrugada de este jueves en un accidente automovilístico ocurrido en una autovía cerca de la ciudad de Zamora, en la región de Castilla y León, España. En el siniestro también perdió la vida su hermano André, quien era futbolista profesional en la segunda división portuguesa.

Según informó la Guardia Civil española, el accidente se registró alrededor de las 00:30 horas, cuando el vehículo en el que viajaban ambos hermanos se salió de la vía mientras realizaba un adelantamiento. Las autoridades señalan que el incidente pudo deberse al reventón de un neumático. Tras salirse del camino, el automóvil se incendió, y cuando los servicios de emergencia arribaron al lugar, los ocupantes ya habían fallecido.

Diogo Jota tenía 28 años y desde su llegada al Liverpool en 2020, se había consolidado como una pieza clave del conjunto inglés, siendo parte fundamental de los logros del club en las últimas temporadas. Además, fue internacional con la selección portuguesa en casi 50 ocasiones, convirtiéndose en uno de los referentes de su generación.

La Federación Portuguesa de Futbol lamentó profundamente la pérdida. A través de un mensaje en la red social X, la institución expresó que Jota “no solo fue un fantástico jugador, sino también una persona extraordinaria, respetada por todos sus compañeros y adversarios”. Asimismo, informó que solicitó a la UEFA guardar un minuto de silencio en memoria de los hermanos antes del encuentro entre Portugal y España en la Eurocopa femenina.

A Federação Portuguesa de Futebol e todo o Futebol português estão completamente devastados com a morte de Diogo Jota e do seu irmão André Silva, esta madrugada, em Espanha.

Muito mais do que o fantástico jogador, com quase 50 internacionalizações pela Seleção Nacional A, Diogo… pic.twitter.com/EN901fH6FG — Portugal (@selecaoportugal) July 3, 2025

La muerte de Diogo Jota ocurre apenas unos días después de que el futbolista compartiera imágenes de su boda, celebrada el pasado 22 de junio. Su sorpresiva y trágica partida conmocionó a la comunidad deportiva internacional, al dejar un profundo vacío tanto en el Liverpool como en el futbol portugués.

GR

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