El coordinador del PRI en el Senado, Manuel Añorve, se refirió al “huachicol fiscal” como un escándalo de seguridad que enfrenta el país y que requiere atención inmediata.

El legislador destacó que los hechos recientes, como la entrega del exsecretario de Seguridad de Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, y el caso del huachicol fiscal, evidencian un fraude masivo que habría sido permitido desde el gobierno federal.

Señaló que, aunque los hijos del presidente López Obrador niegan su implicación, los amparos que los mencionan ya se encuentran en instancias judiciales.

El senador explicó que el huachicol se institucionalizó, involucrando dependencias como la Marina, Aduanas y terminales marítimas. Indicó que este fraude alcanza cifras extraordinarias: 177 mil millones de pesos desviados en un solo año, y cerca de 500 mil millones durante todo el sexenio, recursos que presuntamente habrían sido destinados a campañas políticas y otros intereses.

Manuel Añorve enfatizó que los responsables deben ser castigados y que no puede haber impunidad política. Subrayó la importancia de proteger a los funcionarios que denunciaron estos actos, algunos de los cuales ya sufrieron consecuencias graves.

El líder del PRI concluyó que la fiscalización y la justicia deben llegar hasta el final para garantizar que los culpables respondan por sus actos, y reiteró su compromiso de mantener la vigilancia sobre estos casos, que describió como un escándalo de magnitudes históricas para México.

GR

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