INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

¡Papá es único!

El tercer domingo de junio nos da la grandiosa oportunidad de conmemorar el Día del Padre, por ello felicitamos a todos y cada uno de esos hombres dedicados a promover el desarrollo integral y a acompañar a sus descendientes; aquellos padres que con tanto amor y disposición disfrutan la existencia de sus amados hijos e hijas.

Actualmente, al hablar de “papá” surgen dos opiniones muy distantes. Una que nos hace referencia al padre cómo aquel ser bondadoso, trabajador, respetable, cariñoso y protector de los hijos, aquel a quien se le debe un respeto, que ejerce autoridad en el hogar, quien es responsable de cubrir las necesidades económicas del hogar; sin embargo también escuchamos hablar del padre como aquel hombre ausente, irresponsable, violento y hasta indiferente en relación a la vida y el desarrollo emocional, escolar y evolutivo de sus hijos, aquel que no debe llorar, que debe ser fuerte y cabeza de la familia.

Las estadísticas nos dicen que 82.4 por ciento de los hogares en el país son sostenidos económicamente por el varón y la mayoría con salarios ridículos que no les permiten ofrecer una buena calidad de vida a sus familias.

La paternidad y masculinidad son conceptos y prácticas que han ido evolucionando con el paso de los años; hoy en día es más fácil encontrarnos con un padre que se deja abrazar y besar por sus hijos, que es cariñoso, pero que también expresa firmemente su opinión, que expresa abiertamente y con mayor facilidad sus emociones, pensamientos y que le es más fácil escuchar; sin embargo, aún necesitamos fortalecer el vínculo padre–hijo.

Las estadísticas nos dicen también que los padres, en promedio, les dedican 5.6 horas semanales a sus hijos menores de 6 años, lo equivalente a menos de una hora diaria. Cierto es que la crianza de los hijos no es cosa fácil e incluso en ocasiones puede llegar a ser estresante y frustrante, pero también vivir intensamente esa experiencia de acompañamiento a los hijos es maravillosa y sumamente enriquecedora.

También es cierto que nadie nace programado para ser un excelente padre, hay que prepararse para ello asistiendo a conferencias, cursos y talleres.

Los padres de nuestro país necesitan mejores oportunidades educativas y laborales y que se les reconozca y estimule su cada vez mayor y justa participación en las actividades del hogar y la crianza de sus hijos. ¡Gracias, papás!

[email protected]

fv/i