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Mpox, el problema no se ha solucionado

Desde el 7 de junio de 2022, cuando se diagnosticó el primer caso de viruela símica (mpox) en Jalisco, no existe una ruta clara para el diagnóstico, atención y seguimiento de las personas que llegan a tener la enfermedad.

Desde mayo de 2022, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una emergencia sanitaria por este problema de salud, se ha exhortado a las autoridades locales y federales a emitir medidas para la reducción de daños (rutas de atención, vacunación y campañas de prevención), pero no ha habido una respuesta suficiente.

Por ejemplo, durante el segundo semestre de 2022 se contó con una jornada de salud preventiva para mpox, esfuerzo que aunque fue importante, no fue una solución para mitigar eficazmente los problemas derivados de las transmisiones.

En este momento histórico, a más de un año del primer caso y a solo 48 días de que en Jalisco, y particularmente en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), se reciba al encuentro deportivo LGBT+ más importante del mundo (Gay Games Guadalajara 2023), que contará con asistencia de personas de muchas partes del mundo y que podrían ser portadoras y en su caso transmisoras de mpox, no se observa en ninguno de los niveles de gobierno un interés por realizar acciones para la reducción de daños en este tema en particular.

Aunque la mpox no es una enfermedad que afecte únicamente a personas LGBT+, sí es cierto que, epidemiológicamente hablando, se presenta con mayor frecuencia en personas de la diversidad sexual, particularmente hombres que tienen sexo con otros hombres y que en la mayoría de los casos se encuentran inmunocomprometidos.

Por lo anterior sería altamente deseable e importante que todos los niveles de gobierno involucrados en la organización de este evento deportivo internacional tuvieran un acercamiento con la población en mayor situación de vulnerabilidad y en un ejercicio de gobernanza concreten un plan para la mitigación de daños que responda a sus necesidades y evite el repunte de casos, así como la saturación de los servicios de salud por esta problemática, tomando en cuenta que muchos de estos contagios pueden volverse potencialmente graves en personas con situaciones clínicas muy específicas y que no puedan acceder con oportunidad a atención en salud integral.

Este 4 de noviembre Jalisco tiene la oportunidad de vivir algo histórico siendo sede de los Gay Games, pero también se corre el riesgo de vulnerar a las y los participantes, así como a la población jalisciense por la ausencia de medidas preventivas para mpox y otras ITS.

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jl/I