Desluce Domeq en corrida de Madrid

De poco juego y nulo fondo de bravura, así resultó el encierro de ayer en la corrida de la Feria de San Isidro, en Las Ventas. Sin opciones, aunque con buena presencia, los seis de la dehesa de Juan Pedro Domeq no se prestaron para una tarde de triunfo.

La tarde se antojaba para una corrida de interés, luego de que el primero en el cartel, Cayetano Ortiz, regresara a Madrid después de cinco años de ausencia. Su labor estuvo por encima de los dos de su lote, y la afición así lo entendió, pues aunque estuvo voluntarioso y decidido, poco pudo hacer para conseguir las orejas, dadas las pocas cualidades de sus toros. Aun así, una ovación en el tercio fue el premio y reconocimiento de la afición madrileña.

Por su parte, el coleta Joaquín Galdós confirmó alternativa pero sin aire de triunfo. Deslucido su lote, le impidió tener un doctorado digno de Madrid. Arrojado, Galdós comenzó su labor de muleta rodillas en tierra, para después pintar algunas tandas de derecha de buena ejecución, pero sin la transmisión necesaria para ligar los olés. El toro vino cada vez más a menos, lo que le obligó a escuchar palmas tras su actuación.

Para José María Manzanares, tercero en el cartel, no hubo suerte. Destacó con el segundo de su lote, el toro cierra plaza, pues logró llegar a los tendidos desde capote, para con muleta, ejecutar tandas de calidad y temple. La embestida descompuesta de su toro, acabó por deslucir su labor e impedir el triunfo, sumado a una estocada caída que no ayudó a la ovación.

JJ/I