Alfaro, ¿candidato sin partido?

En los círculos más cercanos a Enrique Alfaro Ramírez se escuchan dos versiones que aunque suene extraño –por lo que se ha ventilado comúnmente- son probables y no imposibles, y que de alguna manera se relacionan: 1. Que solicitará licencia como presidente municipal de Guadalajara a más tardar el 3 de diciembre; 2. Que buscará ser candidato sin partido a la gubernatura.

Hay quienes comentan que en los corrillos naranjas se maneja como fecha probable de su retiro de la alcaldía el 14 o 15 de diciembre y puede ser, pero si es cierto que pretende aplicar una jugada hasta ahora no vista por nadie y que tampoco teníamos en mente que pudiera suceder, entonces hay razón para creer la versión arriba mencionada.

Y es que de acuerdo con el calendario electoral, quienes pretendan ser candidatos sin partido al gobierno del estado deberán de comenzar como aspirantes a recabar las firmas necesarias a partir del 8 de diciembre, de ahí que se refiere que Alfaro Ramírez se retirará del ayuntamiento antes de esa fecha.

De ser así, entonces entenderemos por qué su resistencia, indiferencia o desinterés a establecer el Frente Ciudadano por México en Jalisco, pues apuesta a que tanto su partido Movimiento Ciudadano como el de la Revolución Democrática (PRD) finalmente lo adopten como su candidato sin que necesariamente sea postulado por ellos. O cuando menos MC. Y en este escenario, considera prescindible al PAN que no le garantiza muchos apoyos, pero apuesta a que más de un panista vote a su favor.

Pero buscar la gubernatura sin ser postulado directamente por su partido Movimiento Ciudadano -como es esperado por todos-, tiene para Alfaro otros objetivos a cubrir que le permitirán aventajar a quienes sean los candidatos de otros partidos y ofertarse a la ciudadanía como la mejor opción. Enumeremos:

• Comenzará a recorrer el estado a partir del 8 de diciembre en busca de recabar las firmas necesarias, lo que le permitirá reforzar su presencia en municipios donde no está aún bien posicionado.
• Mientras en los demás partidos –particularmente el PRI y el PAN- estarán enfrascados en sus precampañas internas –aunque sean simuladas- por la búsqueda de la candidatura al gobierno del estado –que serán del 13 de diciembre al 11 de febrero-, él irá solo sin desgaste alguno por todo el estado, incluso concretando amarres en aquellos municipios que crea necesario hacerlo para cuando llegue el momento de la campaña que arranca el 30 de marzo.

En campaña –al estilo López Obrador- desde que fue alcalde de Tlajomulco y hasta ahora como munícipe de Guadalajara, pasando por su candidatura a la gubernatura y como dirigente de Alianza Ciudadana, además de su exposición permanente en los medios de comunicación locales y nacionales, Alfaro considera que no necesita hacer una gran inversión oficial para hacer proselitismo a la gubernatura, y parece que le apostará a limitarse a los recursos que como candidato independiente le otorgue el Instituto Electoral del estado, que es muy menor al que reciben los partidos políticos para esta elección.

Quizás por ello le adelantó a Fernando del Collado en Tragaluz que “va a ser la campaña más austera de la historia de Jalisco”. La austeridad se ajustará al financiamiento para un candidato sin partido, figura que anteriormente no existía.

Otra señal que apoya esta hipótesis es el hecho de que su coordinador de campaña será Alberto Uribe Camacho, alcalde de Tlajomulco, quien, al igual que Alfaro, no es militante del partido Movimiento Ciudadano. Amén de que dejará su cargo hasta finales de enero, dos meses antes de que inicie la campaña.

Que todo lo anterior suena absurdo porque hasta ahora lo hemos visto como estamos acostumbrados a verlo, puede ser, pero hay señales que nos alertan que no lo descartemos

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I