Atlas, vuelta a la pesadilla

El club Atlas está a un paso de entrar en zona de peligro que pone en riesgo su permanencia en Primera División. Lo cierto es que si en este momento el problema aún se puede controlar y superar, otra mala decisión tomada desencadenaría eventos con carácter de irreversible.

El reciente despido de José Guadalupe Cruz de la dirección técnica sin tener listo al sucesor, refleja simplemente que la decisión se ejecutó por un estado emocional que provocó la manera de perder el domingo pasado ante Pumas.

Evidentemente no se está tomando en cuenta únicamente la derrota frente al equipo universitario, sino la acumulación de caídas desde la temporada anterior, sobre todo en esta época de redes sociales que para la afición es muy sencillo manifestar su opinión y ejercer presión con cualquier comentario.

Pero desde antes la dirigencia rojinegra, en la que destacan Gustavo Guzmán y Alberto de la Torre, quienes rinden cuentas al mandamás Ricardo Salinas Pliego, cometió errores que en este momento ya son graves.

No estaban conformes con El Profe Cruz luego de quedar eliminados en Copa MX ante Chivas, y pese a que clasificaron a Liguilla, también contó la forma en que fueron liquidados en Cuartos de Final ante Monterrey, a lo que se agregaron tres derrotas consecutivas (dos en liga y una en copa).

Pero el cese debió darse tras perder ante Rayados y no el lunes pasado, para evitar que el malestar que ya se percibía explotara en el arranque de la temporada.

Tan confundidos están los directivos, que no tienen claro si le dan la oportunidad a Gerardo Espinoza bajo el argumento de que es una persona identificada con los colores y comulga con la filosofía rojinegra, o buscan a un estratega de los que ya conocen el futbol mexicano, para no caer en experimentos que requieren tiempo en un torneo de urgencias.

Los nombres que se escuchan no son precisamente los más alentadores, y no por la falta de capacidad, sino porque cada uno tiene una idea distinta. Las opciones que se escuchan son Javier Torrente, Víctor Manuel Vucetich, Rubén Omar Romano, Ricardo La Volpe, y hasta Tomás Boy.

De las cinco alternativas, sólo Romano y La Volpe son del mismo estilo futbolístico, y los otros tres varían en su esquema, lo que habla de la poca convicción en una filosofía de juego y lo que se busca es simplemente llenar un vacío que la directiva forzó por malas decisiones.

@ofares72

JJ/I