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Jalisco Jazz Festival se mantiene con recortes

Retorno. El músico asegura que cree en la educación musical comunitaria porque él mismo partió de ahí. (Foto: Alfonso Hernández)

Este año el Jalisco Jazz Festival (JJF) estuvo en peligro. A principios de abril sus organizadores en la Fundación Tónica, viendo el panorama algo oscuro por la falta de recursos, pensaron que lo mejor sería cancelar su edición 13.

Debido a las varias dificultades que representan los cambios de administración, el presupuesto federal que ascendió en otras ediciones a casi un millón y medio de pesos no les fue otorgado este año.

Al final decidieron que se haría, aunque con recortes. Habrá sólo un concierto estelar, un evento de procuración de fondos, una ruta de jazz y, como el año pasado, se canceló el seminario educativo.

Su director Gil Cervantes, sin embargo, se muestra positivo y seguro de la importancia de seguir realizando el evento de jazz más relevante en todo el estado.

NTR. ¿Qué pasó con el presupuesto?

Gil Cervantes (GC). No nos dio el escenario. Fue un año atípico, afortunadamente los gobiernos estatales respondieron, hay que gestionarlo, tenemos con qué demostrar que el festival vale. El recurso federal a todos nos opacó, yo espero que eso se corrija y hablando en esa línea supongo que es positivo, sí creo que hay un manejo discrecional horroroso de recursos públicos que se destinaban sin ton ni son, a lo mejor poner candados y que se vea con lupa es necesario. No estoy ni a favor ni en contra del gobierno de Andrés Manuel, pero me parece que sí es importante ver quiénes sí están trabajando. Estamos tranquilos, seguimos trabajando y seguimos transparentes.

NTR. ¿Cómo se consiguieron los recursos que sí se ejercerán?

GC. Estamos hablando de 90 por ciento de recurso público: Zapopan, Guadalajara y el gobierno del estado a través de la Secretaría de Cultura. La otra parte patrocinadores, es que estábamos seguros de que no se haría el festival, se nos cayó el proyecto federal y era difícil asegurar un marco de acción para el programa, cuando vimos un poco de luz al final del túnel decidimos que sí, por eso cambiamos la fecha.

NTR. ¿Cómo se construye en términos financieros un evento como este?

GC. Hemos experimentado y fortalecido áreas para hacer una variedad de capitales, el festival se ha mantenido a flote por una parte por la iniciativa pública que tenemos que gestionar año con año, no es que tengamos etiquetado dinero específico, apelando a los años y el camino recorrido, lejos de que te den dinero y recurso público, es complementar la creación de públicos y trabajar también con los programas que las instituciones tienen, ese es el reto. El segundo es el recurso de la iniciativa privada donde buscamos modelos de retribución, hemos sumado marcas importantes que aportan capital y otras que aportan con especie. Subsistir todos estos años se trata de encontrar un balance, no comprometer ni una ni otra parte, en su mayoría los programas educativos de la fundación son financiados con donativos, de benefactores de distintos niveles, salvo en casos específicos donde el ayuntamiento ha aportado espacios para ciertos programas. Estos tres elementos del esquema son fundamentales, sin uno sólo de ellos la operación anual de la fundación y el festival no sería posible.

NTR: Además del reto financiero ¿cuál es su mayor desafío con el festival actualmente?

GC. Hacer que la gente asista. La oferta cultural en Guadalajara y en la zona metropolitana cada vez es más fuerte y si te fijas hay una gran demanda de boletos gratis y ofertas, hay un reto muy fuerte con el involucramiento de los públicos. Este no es un negocio, es un festival con causas, hacer entender eso ha costado. Creo que para cualquiera que haga un espectáculo.

NTR. ¿Cómo se consolida el programa?

GC. 2013 fue un caso especial, hicimos una de las curadurías que más nos gustaron, fue una edición muy importante de ese año y otros subsecuentes por el volumen y la cantidad de artistas que vinieron. Sin embargo, el resto de los años hemos tenido artistas muy importantes, no tan conocidos en ciertos sectores, pero siempre tratamos de involucrar a artistas emergentes nacionales y locales, con propuestas interesantes y artistas con experiencias que puedan fungir también como mentores en master class. Más que nombres pensamos en aportar a la experiencia, el tipo de música y la manera que se toca. De ahí partimos.

NTR. Siguen apoyando la educación comunitaria, tanto en La Ferro como en el programa de alto rendimiento, ¿cómo le apuestan a esa parte de la fundación?

GC. En la música no hay shortcuts: estudiar más estudiar da un igual a tocar mejor. Lo hemos mejorado a partir de un serie de investigaciones que realizamos con Mireya Arreola, el programa tiene un alto grado de expectativa de nuestra parte, dura tres años, buscamos los canales adecuados nacionales y en el extranjero. Buscamos espacios adecuados, 95 por ciento está subsidiado, hay muchas cosas que hay que pulir, pero sabemos que vale la pena. Atendemos a 33 personas en el programa por grupo, pero en todos los programas educativos atendemos aproximadamente a 200 personas actualmente.

NTR. ¿Por qué crees que vale la pena?

GC. Cuando me fui de Guadalajara me fui buscando programas como estos, afortunadamente tuve una beca y pude estar en Boston. Ahora hay más oportunidades y mucha información en Internet. Para mí vale la pena contribuir al desarrollo de la escena musical en este tipo de programas: yo nací como músico en un programa comunitario de mi pueblo, con esa mentalidad de trabajo en equipo. Es una satisfacción personal de la gente que ha pasado y de la que está y que vendrá, serán siempre afines a la idea.

NTR. ¿Por qué se acabó el seminario anual?

GC. Es complejo gestionar esos recursos. Es un seminario en el que en casi una semana se te van 2 millones de pesos, siempre hemos encontrado esta parte de protesta por parte de algunos músicos sobre el costo del seminario, cuando intentamos hacerlo lo menos costoso posible. Es difícil. Al no encontrar mucho eco decidimos ponerlo en pausa y reestructurarlo con calma.

ASISTE

El Jalisco Jazz Festival se realizará del 24 al 28 de septiembre. El Teatro Degollado y el Paseo Alcalde serán dos de los escenarios de sus presentaciones

Conoce

El programa completo se irá anunciando semana con semana a través de http://www.jaliscojazzfestival.com

JJ/I