La presidenta Claudia Sheinbaum respondió este jueves a las declaraciones de su homólogo estadounidense, Donald Trump, quien acusó que México envía aguas residuales al Río Tijuana, lo que representaría un riesgo para Texas y California. La mandataria aseguró que el señalamiento surge en el marco de las negociaciones bilaterales sobre el cumplimiento del Tratado de Límites y Aguas de 1944, particularmente en lo relativo a la entrega de agua mexicana.

Sheinbaum sostuvo que quizá Trump “no estaba debidamente informado”, pues desde el sexenio de Andrés Manuel López Obrador se han impulsado obras de saneamiento, incluida la construcción de una planta de tratamiento que ya opera. A la vez, reprochó que Estados Unidos incumple su propio compromiso de ampliar la planta tratadora ubicada en San Diego, infraestructura que debía complementarse con los esfuerzos mexicanos.

“Ellos tienen que construir una planta de tratamiento que está en San Diego; todavía no lo hacen, ellos deben cumplir con eso. En nuestro caso tenemos que hacer otras obras, que vamos a realizar a partir del próximo año”, afirmó.

La presidenta reconoció que México tampoco ha concluido las obras pactadas con la Agencia Ambiental de Estados Unidos, aunque aseguró que su ejecución iniciará en 2026. Agregó que funcionarios de ambos gobiernos continúan reuniones para alcanzar un acuerdo integral sobre la entrega de agua prevista en el tratado, tema que ha sido uno de los ejes de presión de Trump en las últimas semanas.

Sheinbaum explicó que la sequía que afectó al norte del país durante los últimos años impidió cumplir con los volúmenes acordados, pero recordó que el tratado permite compensar los faltantes en el ciclo siguiente. “Hay avances, pero todavía no se cierra el acuerdo. Va bien. Tiene que haber un reconocimiento de ambos países de que fueron cinco años de sequía”, indicó.

GR