INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

Mexicali: triunfó la defensa del agua

Las pretensiones de la empresa cervecera trasnacional Constellation Brands para instalarse en Mexicali iniciaron desde 2015; los ejidatarios denunciaron desde entonces la dotación de tierras a la compañía a un precio irrisorio. Sin estudios de impacto ambiental, el gobierno local del PAN otorgaría los permisos para avanzar en la construcción.  

En enero de 2017 se organizarían en Mexicali las primeras manifestaciones multitudinarias en defensa del agua y de resistencia al proyecto extractivista; algunas fueron reprimidas utilizando la fuerza pública, como aquella en contra de personas que pretendían bloquear el acceso de máquinas al lugar de construcción de la planta, resultando heridos adultos mayores y mujeres en el enfrentamiento con la policía (2018).  

En 2019, el Colegio de la Frontera Norte (Colef) realizó un estudio sobre la manifestación de impacto ambiental de la planta, destacando que se pretendía hacer uso de una cantidad de agua equivalente a la quinta parte de lo que consumiría la ciudad de Mexicali y que los metros cúbicos de líquido necesarios para el funcionamiento de la cervecera serían cerca de 44 por ciento de las reservas para el Valle. Con relación a la creación de empleos, señalaron que no era significativo, pues en Mexicali había industrias que generaban una cantidad mucho mayor de empleos, utilizando mucho menos agua. 

Un referente clave en la defensa del agua fueron las acciones emprendidas por el colectivo Plebiscito Sí, que desde 2017 denunció irregularidades en la instalación de la cervecera e inició el proceso legal para solicitar que, con base en la Ley de Participación Ciudadana de Baja California, se sometiera a consulta de la población la decisión de otorgar el agua a la empresa. A pesar de que la ley establece que deben recolectarse aproximadamente 14 mil firmas para iniciar el proceso del plebiscito, el colectivo entregó más de 20 mil; aun así, el Instituto Electoral de Baja California resolvió que la petición era “intrascendente para la vida pública del estado” (IEEBC/CG/PLB/001/11-10-2018). 

Esa decisión fue impugnada en diversas instancias por parte del colectivo Plebiscito Sí; en el Tribunal de Baja California, la Sala Regional de Guadalajara y hasta en la Sala Superior del Tribunal Electoral. Los magistrados de Guadalajara (febrero 2019) resolvieron confirmando la resolución de Baja California en el sentido de que era “intrascendente” y la Sala Superior del Tribunal (SUP-REC-378/2019) desechó de plano el recurso, pero dos de sus magistrados emitieron voto particular señalando que la petición “sí reúne los requisitos de relevancia y trascendencia pues el bien que se alega es el derecho humano al agua”. 

La defensa del agua, lejos de cesar, se amplió; por su parte, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos detectó anomalías e ilegalidades de todo tipo en la instalación de la empresa cervecera, resolviendo violación al derecho humano al agua y emitió la recomendación (1/2020) para Conagua y el Ejecutivo de Baja California, demandando la exhibición de las probanzas del apego constitucional y legal en todos los actos administrativos con los que habían autorizado la instalación de esa empresa. 

Finalmente, en este mes de marzo y frente a todos los intentos por bloquear el plebiscito, se realizó la consulta a la ciudadanía; como resultado, el pueblo de Mexicali dijo “NO” a la instalación de la planta de Constellation, sentando un valioso precedente en el sentido de que es posible luchar y vencer los intereses económicos trasnacionales que pasan por encima del bienestar popular. 

Ahora toca a todos los mexicanos respaldar esta valiente decisión del pueblo de Mexicali y exigir que la empresa salga de su territorio y del país. 

jl/I