El periodista e investigador Ricardo Ravelo presentó su más reciente libro, “Fentanilo: la era diabólica de las drogas químicas”, una investigación que revela la expansión del narcotráfico, la corrupción institucional y la incapacidad del Estado mexicano para contener al crimen organizado.
En entrevista, Ravelo señaló que el 80% del territorio nacional está bajo control de grupos criminales, un fenómeno que —afirmó— no puede entenderse sin la protección política y militar que reciben las organizaciones del narcotráfico.
“El corazón de la mafia está en el poder político”, dijo. “Tenemos gobernadores, alcaldes y policías involucrados en redes criminales. El Estado no sólo no logra contener a las bandas, sino que además les ofrece impunidad”.
El autor explicó que seis cárteles —entre ellos Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, la Familia Michoacana y Cárteles Unidos— fueron declarados por Estados Unidos como organizaciones terroristas debido a su control de aduanas, terminales portuarias, aeropuertos y carreteras, así como a su participación en el tráfico de fentanilo.
Ravelo describió la actual crisis como una “gobernanza criminal”, donde el narcotráfico no sólo domina territorios sino también estructuras políticas y económicas.
“Los alcaldes que no negocian con los cárteles terminan asesinados. El caso de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, lo confirma. Murió por negarse a colaborar con el crimen organizado”, advirtió.
El periodista sostuvo que México no ha construido una verdadera política antimafia, pues las estrategias actuales se limitan a estadísticas y decomisos, sin atacar las redes de corrupción que sostienen al crimen.
“Militarizar puertos y aduanas no resolvió el problema. El flujo de fentanilo continúa. Hay redes empresariales y políticas detrás del tráfico de drogas que siguen intocadas”, señaló.
Sobre el impacto económico del narcotráfico, Ravelo habló de una nueva forma de presión criminal: la “narcoinflación”, mediante la cual los grupos delictivos imponen precios de productos básicos para mantener el cobro de extorsiones en estados como el Estado de México y Michoacán.
“Los ciudadanos pagan dos impuestos: uno al gobierno y otro a los grupos criminales”, lamentó.
En su investigación, Ravelo también alertó sobre la aparición de drogas aún más potentes que el fentanilo, como el carfentanilo y la cocaína rosa (Tusi), elaboradas en laboratorios clandestinos sin control alguno.
“Un joven que consume fentanilo por primera vez puede morir en ese instante. Es la droga más mortal de la era moderna”, subrayó.
Finalmente, Ravelo adelantó que su próxima investigación abordará el huachicol y la corrupción fiscal, fenómenos que, dijo, se agravaron bajo la protección de redes políticas y militares.
“La corrupción no se abatió con López Obrador; se acrecentó y contaminó a las fuerzas armadas”, concluyó.
GR












