Que Jalisco haya rebasado las 16 mil personas desaparecidas es una noticia que socialmente lastima. Sí, porque son más las familias jaliscienses que se van sumando a la pesadilla de no conocer cuál es el paradero de uno o más de sus integrantes; de no saber en qué circunstancias de pronto no se supo acerca de su vida; de empezar o continuar con daños psicológicos y físicos la búsqueda, con sus propios y muchas ocasiones escasos recursos; de enfrentar riesgos cuando se trata de una desaparición forzada o cometida por algún grupo delictivo; de comprobar cómo transcurren días, semanas, meses o años sin que la vicefiscalía informe o anuncie la buena nueva; de ser víctimas de la indiferencia social.
La cifra de desapariciones, en su conjunto, en vez de disminuir va al alza en Jalisco. La entidad continúa en el primer lugar nacional. En lugar de dar resultados, suma más dolor a la crisis nacional de desapariciones. Sí, las autoridades responsables también localizan personas, hay que reconocerlo, como también visibilizar que no han detenido hasta ahora que el número de víctimas siga aumentando, que la impunidad tampoco cese.
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Habitantes de la comunidad indígena de San Lorenzo de Azqueltán, ubicado en la región norte de Jalisco, marcharon en la Ciudad de México y Guadalajara para exigir justicia por el asesinato a tiros de Marcos Aguilar Rojas y las heridas con que resultó Gabriel Aguilar Rojas. Allá se dirigieron a la Secretaría de Gobernación; aquí, a la Comisión Estatal Indígena. Demandan medidas de protección ante el aumento de las agresiones al pueblo, integrado por wixaritari y tepehuanos.
Ayer fue el Día Internacional de los Derechos Humanos. Colectivos señalan que en Jalisco suman diez los defensores de derechos humanos victimados este año y exigen que cada asesinato no quede impune.
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Luego de la intervención de los gobiernos federal y estatal, finalmente ayer se reunieron en palacio de gobierno representantes de la empresa José Cuervo; el secretario general de Gobierno, Salvador Zamora, como mediador, y el alcalde de Tequila, Diego Rivera Navarro. El edil había guardado silencio en redes sociales, tras el conflicto con la compañía tequilera hasta que ayer subió un video al feis.
El gobierno estatal informó que facilitó un acuerdo de entendimiento que permitirá avanzar con certeza jurídica y en beneficio de la comunidad. Hubo acuerdos. Por ejemplo, el municipio emitirá una resolución para definir con claridad el área urbana del terreno y actualizar la información catastral correspondiente. La empresa atenderá las obligaciones fiscales derivadas del pago del impuesto predial y de licencias de urbanización.
La duda es cuándo estallará otro sainete en Tequila, donde el alcalde morenista sea de nuevo protagonista. Recordemos que le quedan casi dos laaaaaaaargos años a su administración…
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Movimiento Ciudadano subió a su cuenta oficial de X la imagen de dos jóvenes con vestimenta naranja; uno, varón, con saco, camisa y pantalón de ese color, y, otra, mujer, con vestido escotado. Él la abraza por la cintura y ella le coje la mano que rodea su cuerpo. El mensaje es sugerente: “Estos podríamos ser tú y yo llegando a la posada, pero votaste por ya sabes quién”… ¡Órale!
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