Tras el socavón de 50 metros de ancho registrado en la avenida Ávila Camacho al cruce con Jacaranda habitantes de la zona solicitaron a las autoridades responsables de las reparaciones reforzar la supervisión de obras públicas y privadas en los alrededores, pues sospechan que la actividad constructiva pudo contribuir al daño estructural del subsuelo.
“Ojalá tengan más cuidado con la gente que contratan para que se cercioren de no nomás dejarlos aquí que hagan lo que hagan. Hay que estar al pendiente de lo que están haciendo para que no hagan daños mayores”, expresó María, residente de la zona.
Ella y otros habitantes mostraron además preocupación debido a que el socavón se registró fuera del temporal. Apareció el sábado.
“Los vecinos dijeron que era un agujerito, pero al rato se fue haciendo la cosa grande hasta que ya tronó y ahí. Ahorita ya no está lloviendo, pero cuando llueve el paso de nivel siempre tira agua, cada que llueve tenemos prohibido pasar porque se atasca y los coches suben hasta arriba”, agregó.
Juan, quien también habita en los alrededores, lamentó que en años recientes se hayan retirado árboles que ayudaban a absorber el agua en la zona. Además, expuso que en el punto afectado no existían bocas de tormenta ni infraestructura de desagüe que pudiera mitigar la filtración de agua.
En torno al megahoyanco, el Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) informó el domingo que debido a las labores de reparación la circulación permanecía cerrada. En la zona sólo hay tránsito local con el fin de facilitar el acceso a viviendas, comercios y planteles educativos de la zona.
Los trabajos de rehabilitación avanzan de manera continua y se prevé que la vialidad quede totalmente habilitada el jueves 27 de noviembre.
jl/I











