Quinto Patio

El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no les hizo caso a los gobernadores de la Alianza Federalista y no se reunieron antes de la discusión en la Cámara de Diputados del Presupuesto de Egresos de la Federación 2021. Por lo tanto, no hubo modificaciones y los diputados aprobaron en lo general el proyecto, y estaban anoche debatiendo más de mil reservas que registraron los grupos parlamentarios. 

Total, que el desdén hizo enojar a los aliancistas, quienes calificaron como una infamia lo hecho por los diputados de Morena, y el gobernador Enrique Alfaro no se quedó atrás. Como ya había advertido, en redes sociales arremetió contra siete legisladores federales morenistas por su votación “darle la espalda a los jaliscienses”. No faltó la amenaza. Si no se revierte la decisión, a Jalisco no le quedará de otra más que iniciar el “camino para recuperar lo que le pertenece”. 

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Por cierto, ya carrereados, ¿alguien conoce a los diputados federales morenos por Jalisco? Alfaro subió a redes el nombre y rostro de cada uno. Los siete “agraviadores” del estado (Alfaro dixit) son legisladores que ni fu ni fa, son grises, no se sabe de ellos y ellas, no hacen vida pú-bli-ca en la entidad. 

Anotemos que si el gobernador señala que los legisladores federales de Morena “se pusieron a las órdenes de un partido político”, y no de la gente que dicen representar, mucho menos de sus necesidades, sería bueno que volteara ver a los diputados naranjas locales, prestos a las órdenes… del Ejecutivo. 

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La diputada Patricia Meza Núñez dio el brinco como chapulina: de Morena saltó a Movimiento Ciudadano (MC) sin ninguna pena y, claro, sin sorpresas. En el Congreso local era evidente que respondía más a los intereses del partido naranja que a los de Morena, desde que dio su aval a la deuda pública de 6 mil 200 millones de pesos en contra de lo pedido por los morenos. En los hechos sólo se notará su cambio de lugar en el recinto legislativo, porque ahora sí se instalará en la bancada emecista, porque en votos ya lo hacía. 

Salvador Caro Cabrera, coordinador parlamentario de MC, la colmó de halagos, al grado de que aseguró que era casi casi la mejor legisladora, aunque muchos lo dudaron. Habrá que observar si es cierto que destaca o sólo sigue órdenes como hasta ahora, y si le cumplen la promesa de ayudarla en sus aspiraciones políticas en Tlaquepaque. Lo que sí es que MC puede recibir la condecoración del mejor partido pirata de la Legislatura; y si no, súmenle cuántos legisladores ha pirateado. ¿Le contamos? 

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Ya sabemos que los cargos de consejeros ciudadanos del Consejo de la Judicatura y de magistrados del Supremo Tribunal de Justicia del Estado son muy a-pe-te-ci-bles, que son huesos de buen sabor que duran años, y que las fracciones parlamentarias del Congreso del Estado suelen repartirse los cargos entre sus afines, en lo que se llaman “cuotas” partidistas negociadas en lo oscurito. Pues bien, los preparativos formales para los próximos nombramientos se harán con la integración de comités de trabajo, como acordó la Comisión de Seguridad y Justicia. 

Los susodichos son comités académicos que se dedicarán, si el pleno los aprueba, a elaborar el examen de los suspirantes a ocupar uno de los cargos referidos: de diseño, de validación del objeto de medida, de elaboración de reactivos, de revalidación de reactivos y de validación final de reactivos. Aunque son cinco, se dio a conocer la integración de cuatro de los comités con 44 especialistas. Ojalá que su trabajo sea respetado, porque ya ven que los diputados suelen no hacerlo ni con sus propios acuerdos. Remember el nombramiento de los consejeros de la Judicatura. 

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