A 5 años del 5J, no hay verdadera justicia: Cepad

Los eventos del 4, 5 y 6 de junio de 2020 en Jalisco, conocidos como el “Halconazo Tapatío”, involucraron la represión de manifestantes por parte de más de 200 elementos de la Fiscalía estatal y policías municipales de Guadalajara y Zapopan, en el contexto de protestas por la muerte de Giovanni López.

De acuerdo con Denisse Montiel, codirectora del Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (Cepad), los hechos, que incluyeron detenciones arbitrarias, tortura y desaparición forzada, fueron minimizados por la Fiscalía Anticorrupción, que solo investigó por delitos como abuso de autoridad y no por tortura y desaparición forzada. De los 11 agentes imputados, cuatro fueron vinculados a proceso y solo uno recibió sentencia, evidenciando impunidad.

La coordinadora explica que el Estado no respondió acorde a la gravedad de los hechos, pues la localización de las personas desaparecidas se logró gracias a la movilización social y de colectivos, no por acción gubernamental. El entonces gobernador Enrique Alfaro atribuyó los hechos a una supuesta infiltración del crimen organizado en la Fiscalía, sin que esto derivara en investigaciones.

A cinco años, persisten la falta de justicia y las dudas, agravadas por la ausencia de fiscalías autónomas y por intentos estatales de borrar la memoria colectiva, como la remoción del antimonumento del 5J.

Denisse Montiel señala que la administración de Alfaro se caracterizó por la represión social, patrón que parecería continuar en la actual gestión, como se vio en la reciente represión en el Parque Revolución. Esto genera preocupación sobre la persistencia de la violencia estatal y la necesidad de garantizar justicia, memoria y fiscalías independientes.

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