La española que enamora a América

No ha cumplido ni 20 años y Begoña Vargas está despuntando rápidamente en el mundo de la actuación, primero en su natal España, y ahora, gracias a las plataformas, a nivel internacional.

Inició con papeles pequeños en Paquita salas y Centro Médico, pero gracias a su papel de Roberta en La otra mirada se ganó el cariño del público.

En esa serie de TVE es una alumna fuerte en una academia de señoritas en la Sevilla de los años 20, una chica popular, adelantada a su época que estaba a favor de la emancipación femenina en un mundo machista.

La serie La otra mirada le trajo retos actorales y aseguró que el juicio y la violación fueron lo más complejo, pero fue preparada por un coach, necesitaba estar fuerte para vivir en escena algo que ella misma llamó horroroso.

“En casa visualizo las secuencias, y luego me dejo llevar por el director. A Roberta me parezco en lo impulsiva y sensible. También en su cabezonería y perseverancia. Pero no tengo madera de líder”.

Recordó que de alumna fue hiperactiva e inquieta, le costaba mucho sentarse a estudiar, llevaba uniforme, pero acortaba la falda, se ponía medias, zapatillas y después la regañaban por eso.

Begoña es tan entregada al trabajar, que tras rodar seis meses la serie confesó que el último día no dejó de llorar y estuvo deprimida hasta que logró sacar a Roberta de su cuerpo.

“Esta serie ha sido una mega escuela que me ha hecho madurar como actriz y me ha abierto la mente en muchos temas”.

También en TVE, pero esta vez en su plataforma online Playz, se convirtió en la protagonista de Boca Norte, una webserie juvenil a ritmo de trap, ambientada en un barrio humilde de Barcelona y con narrativa transmedia. Ahí da vida desde a Andrea, quien se ve obligada a adaptarse a un entorno con menores lujos y comodidades.

Esa adaptación se fragua cuando en un centro cultural conoce a un grupo de amigos con los que crea canciones y coreografías para desfogarse así de sus problemas cotidianos. Con un enfoque nuevamente feminista, esta ficción dirigida por Dani de la Orden y Elena Trapé aborda temas como la bisexualidad, la adicción a las redes sociales, la sexualidad y el choque cultural.

Y en Alta mar es parte de la historia a bordo de un lujoso transatlántico rumbo a América en la década de los 40. Todos en el barco sueñan con un futuro mejor en aquel continente. Y la travesía transcurre con normalidad hasta que aparece asesinada una mujer que no figura en la lista de pasajeros.

Sus pasos

Begoña nació en Madrid el 18 de diciembre de 1999. Es actriz, modelo y bailarina, que actualmente está enamorada de Oscar Casas.

Con 10 años comenzó sus estudios de danza moderna en la Escuela Municipal de Música, Teatro y Danza de Loeches. Empezó con la interpretación años más tarde con diversos cursos, realizando obras de teatro infantil. Ha tenido papeles en obras teatrales como Los miserables, de Víctor Hugo o El Conde de Montecristo, entre otras.

"Trabajar con Netflix te da una proyección internacional que con otros proyectos no tienes, lo cual es muy guay porque hace tres o cuatro años los actores y actrices españoles tenían más complicado optar a pruebas fuera de España”, contó Begoña a ¡Hola!

“De esta forma, pueden ver tu proyecto en todo el mundo y es más fácil si quieres hacer pruebas en otros países como Estados Unidos", opina Begoña, que da vida a Verónica, la criada más popular del crucero de Alta Mar.

Aunque le encantaría trabajar en Estados Unidos, Begoña aseguró que ella quiere vivir toda su vida en España, donde está su familia y amigos.

Además de actriz y modelo, el currículum de Begoña incluye la categoría de bailarina.

"Bailo desde que tenía 6 años. Empecé en el colegio con clases de flamenco y ballet, y después me metí a baile moderno", explicó sobre una afición que sus fans han podido conocer gracias a las redes sociales.

La moda: su pasión

"Un día me levanto roquera, otro más pijilla, otro quiero llevar ropa oversized… Cada día me da por una cosa y mis amigos dicen que parece que lo quiero llevar todo, aunque también suelen decirme que visto muy bien. Yo creo que eso es relativo: hay días en los que me arreglo más y otros no tanto. En verano me gusta mucho llevar faldas midi con tops o en conjuntos, y en invierno soy mucho de sudaderas y vaqueros boyfriends".

Curiosamente uno de sus obstáculos en la actuación es ser alta, ya que no puede ser la hija de varias actrices porque son más chaparritas, pero en cuestión de moda, su altura no es suficiente, es de las bajitas.

CURIOSIDADES:

• Al despertar, lo primero que hace es ver el celular
• Las app que más utiliza son de moda y belleza
• Lo que más valora son unas joyas de familia que tienen más valor sentimental que de dinero
• Duerme tapada hasta la cabeza en cualquier época del año
• De niña amaba disfrazarse y montar su teatro
• A los 4 años decía que ella quería salir en la televisión
• De niña veía Heidi que sus papás le ponían en VHS
• Sabe que es un desastre para recordar las fechas de cumpleaños de familia y amigos, y se le olvida contestar llamadas perdidas
• Presume que nació el mismo día de Brad Pitt
• Siempre trae calcetines disparejos, eso no le quita el sueño
• Le hubiera encantado conocer a Audrey Hepburn
• Le teme a la soledad

• Algo que siempre se lleva al set es su ukelele porque ama la música y bailar

Obra:

Alta mar, 2019

La otra mirada, 2019

Boca Norte, 2019

Paquita Salas, 2018

Centro médico, 2017

"Trabajar con Netflix te da una proyección internacional que con otros proyectos no tienes, lo cual es muy guay porque hace tres o cuatro años los actores y actrices españoles tenían más complicado optar a pruebas fuera de España”

Begoña Vargas, actriz

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