Calles inseguras, primer problema para ancianos 

Las calles de Guadalajara no están del todo adaptadas y con la infraestructura necesaria para garantizar el tránsito seguro de personas adultas mayores, concluyó una investigación hecha por el Laboratorio del Hábitat para Personas Mayores del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO).

Más que preocuparse por temas de violencia o inseguridad, la principal problemática y motivo de preocupación para adultos mayores en Guadalajara es la posibilidad de caerse en la calle y lastimarse a causa de la falta de infraestructura segura, menciona la investigación titulada Inseguridad percibida y caminar de las personas mayores: estudio en Santiago de Chile y Guadalajara.

El Laboratorio del Hábitat para Personas Mayores del ITESO ha desarrollado proyectos de investigación que permiten ubicar los espacios en los que se encuentra este grupo poblacional y trabajar en el diseño de políticas públicas y herramientas para mejorar su calidad de vida. De hecho, la investigación referida fue presentada a autoridades del DIF Jalisco y del Municipio de Zapopan.

Alejandro Pérez Duarte, coordinador del laboratorio, dijo que la investigación fue un proyecto realizado en coordinación con la Pontificia Universidad Católica de Chile y con apoyo de Volvo Research and Educational Foundations. El académico explicó que el objetivo fue estudiar cómo influyen los barrios y la percepción de seguridad en el caminar de las personas adultas mayores, pues “la caminata es muy importante para ellas”. 

Por su parte, Gabriela Ochoa, académica del Departamento del Hábitat y el Desarrollo Urbano (DHDU) del ITESO, expuso que el estudio se hizo en Santiago de Chile y en Guadalajara por las similitudes entre ambas ciudades, tanto por su número de habitantes como de porcentaje de población adulta mayor. 

Por ciudad se eligieron dos barrios: Santa Tere y Santa Margarita, en Guadalajara y Zapopan, y San Miguel y Peñalolén, en Santiago; fueron seleccionados por la cantidad de personas mayores que los habitan y por los servicios que ofrecen y que invitan a salir de casa. El estudio se realizó con una encuesta, un seguimiento telefónico y caminatas con sesiones de conversación. Participaron 44 personas de entre 60 y 74 años: 24 en Guadalajara y 20 en Chile. 

A partir de las conclusiones crearon el proyecto de la Calle Azul, iniciativa que busca reformar las vialidades barriales para hacerlas más amigables con las personas adultas mayores. La propuesta contempla la adecuación de espacios caminables y lugares de permanencia (parklets), iluminación a ras de piso para mejorar la visibilidad, señalética y la creación de un distintivo para comercios que sean amigables con las personas adultas mayores. 

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