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Proponen método para facilitar búsqueda de fosas clandestinas

(Foto: Especial)

Con el objetivo de optimizar recursos, reducir los tiempos de búsqueda y minimizar los riesgos para las familias y brigadas que participan en la localización de personas desaparecidas, la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Jalisco, en conjunto con instituciones académicas y forenses nacionales e internacionales, desarrolla un innovador método científico que busca interpretar los indicios que deja la propia naturaleza sobre la presencia de fosas clandestinas.

El proyecto, que se ejecuta en centros de experimentación forense instalados en espacios universitarios, parte de una premisa tan poética como trágica: “De mi cuerpo descompuesto crecerán flores”. La investigación se centra en los cambios que se producen en la vegetación cuando cuerpos en descomposición alteran el balance químico del suelo. Minerales y nutrientes liberados durante el proceso impactan el crecimiento de las plantas, generando patrones visibles que podrían facilitar la detección de fosas.

“Queremos desarrollar el conocimiento necesario para usar mejor lo que tenemos, pero sobre todo para reducir el riesgo tanto a las familias como al personal que asiste a las búsquedas”, explicó Víctor Hugo Ávila Barrientos, comisionado estatal de Búsqueda de Personas. El funcionario destacó que el proyecto es resultado de la voluntad colectiva de distintos sectores comprometidos con una causa común: encontrar a quienes faltan.

Ciencia con sentido humano

Para simular las condiciones de una fosa clandestina, los investigadores utilizan cadáveres de cerdos —debido a su similitud anatómica y de descomposición con el cuerpo humano— que son enterrados a diferentes profundidades: en promedio, a 75 centímetros y 1.25 metros.

Hasta ahora, se han excavado 16 fosas experimentales en tres sedes universitarias: el Centro Universitario de Tonalá (CU Tonalá), la Universidad Politécnica de la Zona Metropolitana de Guadalajara (en Cajititlán), y el Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA). Dos de las fosas se dejaron vacías, como control, para comparar el comportamiento del terreno y la vegetación.

La Universidad de Guadalajara contempla habilitar un cuarto centro de experimentación en otra de sus sedes, como parte del fortalecimiento a este proyecto pionero en el país.

Este enfoque científico podría representar un cambio de paradigma en las labores de búsqueda, brindando nuevas herramientas basadas en el conocimiento del entorno naturaleza.

GR