INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

Judicial: controversia sin miedo

En medio de una serie de agresiones verbales del diputado Salvador Caro Cabrera, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso, y de una manifestación registrada afuera del palacio de justicia, la mayoría del pleno del Supremo Tribunal aprobó recurrir a la controversia constitucional en contra de las reformas al Poder Judicial aprobadas por el Legislativo, sin descartar que se presenten, además, amparos indirectos de los magistrados.

En mi columna del 24 de junio –“Judicial: van a la controversia”– comenté que después de su sesión del jueves 20 los magistrados se reunieron en privado y aprobaron iniciar el estudio y análisis de las reformas aprobadas por los diputados para plantear de manera formal en el pleno la propuesta de recurrir a la controversia, y que ayer puso sobre la mesa el magistrado Manuel Higinio Ramiro Ramos.

En aquella reunión privada la mayoría de los magistrados estuvo de acuerdo y aprobó contratar a un especialista que se hiciera cargo del estudio y análisis. Ahora, ya con el resultado, se puso a consideración recurrir a la Suprema Corte y en eso estuvieron de acuerdo 16 magistrados, 11 se pronunciaron en contra, uno se abstuvo y otro más no emitió voto.

De todos esos votos, destacó el que emitió en contra el presidente del Poder Judicial, Ricardo Suro Esteves, bajo el argumento de que “tenemos que esperar qué va a pasar con esa reforma en la ley orgánica, tenemos que esperar qué va a pasar en realidad con la reforma constitucional si es que se aprueba y hacer un análisis jurídico sobre qué y cómo podemos inconformarnos, si es que hubiera materia para inconformarnos; a final de cuentas tenemos que tener bases sólidas para ello”.

Valga decir que a sus compañeros magistrados no les extrañó que Suro Esteves votara en contra; sabían que así lo haría. Dicen que estaba cantado, pues su conducta sobre la reforma no fue del todo en contra, sino que advirtieron con desconfianza su postura muy apegada al Ejecutivo, particularmente, de ahí que algunos magistrados han decidido recurrir al amparo para no estar supeditados –como lo referí en otra entrega anterior– a que Suro se desista de la controversia en un futuro o quien pudiera sucederlo en el cargo el próximo año.

En este marco, también llamó la atención la extraña lentitud con que los ayuntamientos aprueban las reformas constitucionales y la hipótesis es que desde el Ejecutivo y el Legislativo le apostaron a que la decisión del Judicial de irse o no a la controversia se retrasara más tiempo o se abordara hasta que fuera publicada, como lo solicitaron algunos magistrados y fue la postura de su presidente Ricardo Suro, con el propósito de que en ese lapso se cubrieran las vacantes de magistrados –cinco actualmente– con el método vigente y, de esta manera, lograr que hubiese mayoría en contra de recurrir a la Suprema Corte. Al parecer les falló la estrategia.

Hasta el momento se sabe que 35 ayuntamientos han aprobado la reforma constitucional, pero curiosamente ayer el diputado Caro Cabrera dijo que esperaban que para el viernes se tenga el aval de 63, o sea, en 48 horas se tendría la aprobación de más ayuntamientos que en varias semanas. ¿Mera coincidencia o luz verde para que la aprueben, luego de que el Judicial ya decidió irse a la controversia?

Cabe señalar que algunos diputados cabildearon para que varios puntos motivo de una controversia quedaran asentados en la ley orgánica, pero al parecer tampoco prosperó el intento ante la decisión firme de la mayoría de los magistrados de acudir ante la Corte, confiados en que la resolución les será favorable, al menos de inicio en lo que toca al haber de retiro.

ES TODO, nos leeremos ENTRE SEMANA.

JJ/I