INICIO > PAÍS
A-  | A  | A+

Deuda pública en México afecta el crecimiento económico

(Foto: Cuartoscuro)

La especialista y catedrática en economía de la Universidad Panamericana, Nora Ampudia, señaló que el crecimiento de la deuda pública y la inflación están perjudicando tanto a la economía nacional que las becas del bienestar y los programas sociales van a resultar insuficientes.

El principal problema es que el gobierno está gastando más dinero del que tiene, por lo que necesita pedir prestado. Según el último comunicado de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sobre las finanzas públicas y la deuda pública en abril de 2025, el saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público es de 17.5 billones de pesos, lo que representa el más del 52% del Producto Interno Bruto.

Esta deuda es el reflejo de un déficit fiscal, lo que significa que el gobierno gasta más de lo que gana.

La primera consecuencia es el desplazamiento de la inversión productiva, que es cuando las empresas y los bancos prefieren prestarle dinero al gobierno en vez de invertir en negocios, lo que frena la creación de empleos y el crecimiento económico e incrementa la tasa de interés para cualquier tipo de préstamo.

La segunda consecuencia es que, si la inflación de México es mayor que la de sus socios comerciales, las exportaciones se encarecen y se pierde competitividad.

La tercera consecuencia es el aumento de la pobreza y el crecimiento de la desigualdad porque la inflación crece por encima del salario, y lo mismo sucede con los subsidios públicos como las becas y pensiones del bienestar, que, además son gastos no productivos.

Las promesas de campaña de que proyectos como el Tren Maya, el aeropuerto Felipe Ángeles o Mexicana de Aviación iban a generar excedentes no se cumplieron, ya que operan con pérdidas y no generan ingresos para financiar el gasto social.

“El gobierno gasta mucho y gasta mal, el gobierno tiene que endeudarse, pero al endeudarse, genera más problemas que los beneficios que le da a la población con los programas de ayuda pública”, sentenció.

La especialista concluyó que hay una clara “falta de visión” y una ausencia de evaluación técnica de las consecuencias del gasto público. El país necesita con urgencia una reforma hacendaria integral, no sólo fiscal, que reorganice la lógica del gasto público, lo haga más racional y promueva el crecimiento económico, pero no se ve que este gobierno tenga la intención de hacerlo.

GR