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El ranking digital sustituye a la justicia 

(Experto. La ponencia inaugural en el Paraninfo Enrique Díaz de León, la dictó el doctor Ariel Kaufman, catedrático de derechos humanos de la Universidad de Buenos Aires. Foto: Especial)

Con el fin de advertir acerca de los peligros que implica el uso irresponsable de internet, el jurista argentino Ariel Kaufman impartió en el Paraninfo Enrique Díaz de León la conferencia magistral Educación y discurso de odio, con la que dio inicio el primer Congreso Nacional de Derechos Universitarios. 

Uno de los ejes del discurso de Kaufman fue la contraposición entre la escuela entendida en el sentido tradicional y el modelo de autoeducación que fomentan el internet y las redes sociales, un esquema que favorece valores opuestos a los que han fundado hasta ahora los grupos humanos. 

“La escuela enseña que es necesaria la disciplina y los esfuerzos para aprender y que esos esfuerzos son y serán reconocidos. En internet se aprende que los conocimientos están allí, que no hay que hacer esfuerzos para internalizarlos, sólo recordar cómo llegar a ellos. La escuela enseña que la vida se vive con los otros, junto a los otros, dentro de los otros y que el destino de todos es en buena parte compartido. Internet enseña, por el contrario, que se puede vivir una vida en soledad, frente a una pantalla, lejos de los otros”, dijo. 

Este nuevo modelo estaría creando un paradigma distinto en el que la búsqueda de atención, y no la verdad, es el principal valor y en donde la importancia de la autoridad como era entendida hasta ahora es puesta en duda. 

“Internet (…) subvierte ese orden social. Lo que cada uno recibe, lo que le corresponde no es conforme a su conducta, a sus esfuerzos y su actitud, sino conforme a la atención que atrae y a los clics que recibe”, explicó Kaufman. “El ranking digital reemplaza la justicia humana para juzgar el valor y lo que merece cada individuo. La vida se transforma en una competencia sobre la figuración digital”. 

El jurista advirtió acerca de los peligros del uso indiscriminado de internet, que en su estado actual da más importancia a las preferencias del usuario que a la veracidad del contenido. 

“La escuela es el lugar donde aprendemos a diferenciar la verdad del mito, pero en internet el mito puede, por la magia de los algoritmos, tener un valor mayor que el de la verdad”, dijo. 

Desde esta óptica, es la verdad misma la que se está viendo amenazada. Kaufman identifica cuatro elementos necesarios para llegar a la verdad: una lógica, una acumulación de verdades que se construyen unas sobre las otras, un sistema de verificación empírica legítimo y una posición de neutralidad. El internet y su uso irresponsable estarían corroyendo el último de esos elementos básicos. 

“En primer lugar, ciertos sitios tienen una influencia tal sobre nosotros por colores, sonidos, forma gráfica, que resultan más convincentes que otros. Es decir, resulta más grato creer en ellos que en otros sitios que no tienen forma agradable”, explicó el jurista.  

“En segundo lugar, esa influencia ocurre peor aun cuando los algoritmos se enteran lo que los sitios nos dicen y los mensajes que recibimos son exactamente adecuados a lo que queremos escuchar. En tercer lugar, el solo hecho que sólo ciertas opiniones aparezcan en pantalla junto a otras diversas contribuye a crear la sensación de que todo lo que se difunde por internet tiene la misma entidad y el mismo nivel. Además, los resultados de búsqueda que aparecen primero son, frecuentemente, los más extremistas”. 

La solución que entrevé Kaufman no consiste en negar la tecnología, ni pretender frenar su desarrollo, sino en implementar un nuevo modelo educativo. 

“El desafío de la educación para vivir en un mundo digital es triple: educación técnica, educación social y educación ética. No es un surfeo libre inducido por algoritmos sin educación cívica digital lo que no va a llevar a convertirnos en ciudadanos responsables”. 

Kaufman cree que esta triple solución sería posible “Salir a internet a hacer el bien y encontrar el profundo regocijo de hacer cosas por los otros y no principalmente para alimentar la propia satisfacción”. 

Derechos universitarios 

Desde ayer la Universidad de Guadalajara (UdeG) es sede del Congreso Nacional de Derechos Universitarios donde se exponen más de 100 ponencias de expertos para generar esquemas de colaboración y construir una cultura de paz en los planteles de las Instituciones de Educación Superior (IES) del país. 

“Conscientes de los desafíos se organiza este Congreso Nacional de Derechos Universitarios. En primer término, para dar cumplimiento con el programa de trabajo anual que tiene la defensoría, que me honro en dirigir. Y, en segundo, para dar énfasis en las acciones preventivas y proactivas, así como consolidar un diagnóstico claro en toda la Red Universitaria que permita establecer rutas y políticas institucionales y acciones inmediatas”, afirmó el defensor de los Derechos Universitarios de la UdeG, Dante Haro Reyes. 

La Defensora de los Derechos Universitarios de la UNAM, doctora Guadalupe Barrena Nájera, enfatizó la importancia de los derechos universitarios, su discusión y fomento. “Aquí, en la Universidad de Guadalajara, aprecio mucho y observo con entusiasmo que sus diferentes centros universitarios desarrollan iniciativas importantes que contribuyen al trabajo en este tema, y eso me parece una enseñanza importante para todos nuestros colegas de las demás universidades de México y el extranjero”, añadió. Redacción 

FRASE:

“El desafío de la educación para vivir en un mundo digital es triple: educación técnica, educación social y educación ética. No es un surfeo libre inducido por algoritmos sin educación cívica digital lo que no va a llevar a convertirnos en ciudadanos responsables”: Ariel Kaufman, experto 

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