75 años de Kobayashi   

Kobayashi y Maskawa sugirieron que podría haber una tercera generación de materia, y lo hicieron mucho antes del descubrimiento experimental de cualquier miembro de ese grupo.   

            Kent Wade Staley, The Evidence for the Top Quark: Objectivity and Bias in Collaborative Experimentation, CUP, Cambridge UK (2004), p. 11  

Si bien el concepto de átomo fue legado a la humanidad por los griegos Demócrito de Abdera (circa 460 AC- circa 370 AC) y Leucipo de Mileto (siglo 5to. AC) como la parte más elemental de la materia, dado que en aquella época no existían los instrumentos experimentales por los cuales se pudieran aportar las evidencias de la existencia de tal categoría –entendida como el mínimo constitutivo, indivisible e indestructible– hubimos de esperar hasta que la Física teórica y experimental del siglo pasado postulara la probable existencia del verdadero átomo en el sentido etimológico del término: el cuark (ver El pegaso de Sigüenza, NTR, Joyce y los 'quarks', 07 de febrero de 2016).

Así, la aportación del físico Makoto Kobayashi, quien viera la primera luz en Nagoya, Japón un 7 de abril de 1944, reconocida con una cuarta parte del Premio Nobel de Física 2008 “por el descubrimiento del origen del rompimiento de simetría que predice la existencia de al menos tres familias de cuarks en la naturaleza” (ver https://www.nobelprize.org/prizes/physics/2008/summary/) difícilmente puede ser entendida por los estudiantes de los actuales programas de bachillerato, en los que la Física ha sido reducida a una mínima expresión que no les permite dilucidar los principios físicos de los artilugios electrónicos utilizados por dichos adolescentes.

La violación al principio de simetría, principio en la Física que le permitió a Paul Adrien Marie Dirac (1902-1984) postular la existencia de antimateria, en el caso de los cuarks, que entre sus curiosidades está la de tener cargas eléctricas fraccionarias –entendida la unidad como las cargas del electrón y el protón– abre la posibilidad de encontrar otros tipos, como el llamado top cuark, que es el más masivo y fue descubierto experimentalmente el 22 de abril de 1994 aunque los artículos correspondientes se publicaron hasta 1995, fortaleciendo con ello la existencia de la interacción electrodébil.        

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